-
Testigos De La Navidad: Zacarías
Contributed by Wilbur Madera Rivas on Nov 30, 2024 (message contributor)
Summary: Seamos testigos fieles del Señor en medio de circunstancias no ideales para la gloria de Dios.
- 1
- 2
- 3
- …
- 7
- 8
- Next
Un día un hermano de la iglesia me preguntó si estaría dispuesto a ser testigo en un juicio de intestado. Lo que yo debía testificar era que conocía a los hijos del hermano por cuestión de los bienes de su difunta esposa.
Llegado el momento estando ante el juez, tuve la oportunidad de responder a las preguntas que se me hicieron, dando testimonio de lo que sabía. Mi testimonio quedó asentado en las actas y en los videos de la corte.
¡Cuán importante es el papel de un testigo! Alguien que pueda decir, porque le consta de manera personal, cómo fueron o son las cosas, de acuerdo con la verdad. Por el testimonio de un testigo se toman decisiones y acciones.
Pensando en la fe cristiana que profesamos, el testimonio de los testigos que vieron, escucharon y tocaron al Señor Jesucristo, ha sido fundamental y la base de lo que sabemos y creemos acerca del Salvador. Así que esas personas que estuvieron presentes en el momento en que el Señor Jesucristo entró a este mundo fungieron luego como testigos fieles del evento más trascendental que ha ocurrido en la humanidad.
Ellos fueron testigos de la encarnación del hijo de Dios. Fueron testigos del hecho de que el verbo se hizo carne y habitó entre nosotros, y vimos su gloria, gloria como del unigénito hijo de Dios. Fueron testigos de la natividad de nuestro Señor Jesucristo. Fueron testigos de la Navidad.
Este mes en nuestra nueva serie, estaremos explorando el testimonio recabado en el evangelio de Lucas acerca de esos hechos históricos de la llegada al mundo del Hijo de Dios. Estaremos siendo expuestos al testimonio de esas personas que estuvieron en ese tiempo histórico en el entorno en el que nació Jesucristo.
Gracias a ese testimonio, cuidado y guardado por la inspiración del Espíritu Santo, es que hoy sabemos y creemos todo lo que conforma nuestra profesión de fe respecto a Jesucristo el Salvador. Nosotros estamos hoy en una relación con Cristo por ese testimonio verdadero que se cuidó y transmitió de generación en generación hasta llegar a nosotros.
Nosotros creemos sin haberle visto y le amamos sin haberle escuchado, porque Dios usó el testimonio de estos testigos de la Navidad para que la verdad llegase hasta a nosotros.
Lucas empieza su evangelio enfatizando el carácter histórico y testimonial de su relatoría, y del rigor y esmero que empleó para presentar su evangelio.
El evangelio comienza diciendo en Lucas 1:1-4: Muchos han intentado hacer un relato de las cosas que se han cumplido entre nosotros, tal y como nos las transmitieron los que desde el principio fueron testigos presenciales y servidores de la palabra. Por lo tanto, yo también, excelentísimo Teófilo, habiendo investigado todo esto con esmero desde su origen, he decidido escribírtelo ordenadamente, para que llegues a tener plena seguridad de lo que te enseñaron.
Ni Lucas ni Teófilo estuvieron ahí cuando todas estas cosas pasaron, como tampoco estuvimos ni tú ni yo. Pero las cosas que Lucas recabó e investigó con esmero son aquellas que los primeros testigos, los testigos presenciales transmitieron desde el principio.
Lucas, tomando estas informaciones corroboradas, las fue acomodando para formar un todo congruente que relatara la historia de lo que se ha enseñado por generaciones de acuerdo con la verdad. Lucas quiere que Teófilo y nosotros, para tal caso, podamos tener seguridad plena de las cosas que profesamos como creyentes en Cristo, respaldadas por el testimonio de los que lo vieron, escucharon y tocaron de primera mano.
Desde el principio es importante subrayar que nuestra fe no está basada en un relato atemporal fruto de una imaginación creativa, sino nuestra fe, aquello que nos fue transmitido de generación en generación, está basada en hechos históricos ocurridos en el tiempo y el espacio y que fueron atestiguados por personas que de maneras orales o escritas comunicaron lo que vieron y oyeron.
Así que, al leer el evangelio, y para tal efecto, la Biblia entera, debemos tener en cuenta que no es un libro de ciencia ficción o una novela ficticia, sino el relato testimonial de lo que hombres y mujeres vieron y escucharon en tiempo real hace siglos y cuyo testimonio ha quedado registrado para que hoy podamos estar seguros de la enseñanza que hemos abrazado por la fe y que guía nuestras vidas por la eternidad.
El primer testigo de la navidad que toma el micrófono en el evangelio de Lucas es un hombre llamado Zacarías.
Lucas 1:5-7 dice: En tiempos de Herodes, rey de Judea, hubo un sacerdote llamado Zacarías, miembro del grupo de Abías. Su esposa Elisabet también era descendiente de Aarón. Ambos eran rectos e intachables delante de Dios; obedecían todos los mandamientos y preceptos del Señor. Pero no tenían hijos, porque Elisabet era estéril y los dos eran de edad avanzada.