El Espíritu Santo preserva la pureza de la esposa de Cristo hasta Su regreso.
Había un canto que desde muy pequeñito me enseñaron en la iglesia y luego lo repasábamos en casa. Decía más o menos así: (no lo voy a cantar), “Cuidadito los ojitos lo que ven, cuidadito los ojitos lo que ven, hay un Dios de amor que mirando está, cuidadito
...read more
Scripture:
Denomination:
Presbyterian/Reformed