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Summary: ¿Estamos preparados para permanecer firmes en tiempos difíciles? Esta exposición de Filipenses 4:1-3 examina la instrucción de Pablo para permanecer firmes. No podemos hacerlo sin la actitud mental correcta. No podemos hacerlo sin unidad.

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Introducción

Estamos estudiando Filipenses; nuestro texto de hoy es Filipenses 4:1-3. En los tres capítulos anteriores, Pablo ha enfatizado la importancia de mantenerse firmes frente a la persecución y otras dificultades. En el capítulo uno, exhortó: “Solamente que os comportéis como es digno del evangelio de Cristo, para que o sea que vaya a veros, o que esté ausente, oiga de vosotros que estáis firmes en un mismo espíritu, combatiendo unánimes por la fe del evangelio, 28 y en nada intimidados por los adversarios…” (Fil. 1:27-28).i A esa admonición le siguió una instrucción sobre la mentalidad que les permitiría hacer eso. En el capítulo dos señala el ejemplo de Cristo, y en el capítulo tres se presenta a sí mismo como alguien que sigue el ejemplo de Cristo. Mantenerse firmes durante tiempos de adversidad requiere un cierto tipo de pensamiento. Requiere una humilde dependencia de Dios. Requiere respeto y unidad con otros creyentes en el cuerpo de Cristo. Requiere una búsqueda activa y apasionada de las metas correctas en la vida.

Ahora, en nuestro texto, Pablo nuevamente declara explícitamente esa directiva de permanecer firmes en un mismo espíritu. Acompáñenme mientras leo Filipenses 4:1-3 de la Nueva Versión King James.

“Así que, mis amados y deseados hermanos, gozo y corona mía, estad así firmes en el Señor, amados. 2 Ruego a Evodia y a Síntique que sean de un mismo sentir en el Señor. 3 Y te ruego también a ti, fiel compañero, que ayudes a estas mujeres que combatieron juntamente conmigo en el evangelio, con Clemente también y los demás colaboradores míos, cuyos nombres están en el libro de la vida”.

Filipenses 1:27 y 4:1 sirven como LIBROS DE LIBROS en este tema de mantenerse firmes en tiempos difíciles. Pablo es consciente de las presiones que los filipenses están experimentando desde dentro y desde fuera. En su propia comunidad se está desarrollando algún conflicto. Además, están experimentando persecución del mundo que los rodea (Fil. 1:28-30). La preocupación de Pablo es que permanezcan firmes en su servicio al Señor.

Vivimos en tiempos difíciles y hay indicios de que los tiempos pueden volverse aún más difíciles. La impiedad de esta nación seguramente traerá juicio. Más de 60 millones de bebés han sido asesinados desde el caso Roe v. Wade.ii El fallo de la Corte Suprema en 2015 que legalizó el matrimonio homosexual fue un rechazo directo de los límites de Dios sobre las relaciones humanas.iii Actividades como esa han traído juicio sobre civilizaciones antiguas y traerán juicio sobre Estados Unidos.iv Además de todo eso, muchos se están alejando de la fe que nos fue entregada de una vez por todas por Cristo y sus discípulos. Los cristianos de Filipos vivían en tiempos peligrosos, y nosotros también. Es por eso que la instrucción de Pablo en esta epístola es particularmente relevante para nuestras vidas en este momento.

Quiero abordar en nuestro texto la

(1) Exhortación a permanecer firmes

(2) Exhortación a mantener la unidad que es esencial para permanecer firmes.

I. Exhortación a PERMANECER FIRMES.

Filipenses 4:1 comienza con la palabra “por tanto”, que es una traducción de la palabra griega hoste. Conecta la directiva de mantenerse firmes con la instrucción teológica/práctica dada previamente.

Las Escrituras siempre están puntuadas con un “por tanto”. A veces se dice explícitamente, como en nuestro texto. En otros casos, está implícito en la narración. En la historia de David y Betsabé se nos dice simplemente las consecuencias del pecado de David. v El “por tanto” implícito es este: Si no quieres consecuencias como estas en tu vida, resiste la tentación. No hagas lo que hizo David. Aprende de su error. vi

Los teólogos se meten en problemas cuando estudian la Biblia como una búsqueda intelectual, en lugar de aplicar el “por tanto” a su propia vida y comportamiento. vii Santiago advierte: “Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos” (Santiago 1:22). ¿Cómo es que las personas extremadamente inteligentes caen en doctrinas falsas y horribles? Se engañan a sí mismas al no permitir que la palabra corrija su manera de pensar y su comportamiento. El amor por la verdad incluye la voluntad de aceptar sus advertencias y correcciones.viii En su carta, Pablo ha estado avanzando hacia este “por tanto” (esta directiva de mantenerse firme) en nuestro texto.

Estamos en una batalla que es inevitable: la batalla entre el bien y el mal. Mantenerse firmes contra la marea del mal requiere un esfuerzo intencional y diligente de nuestra parte. Pablo abordó esto en Efesios 6:10-14 cuando dijo:

“Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor y en el poder de su fuerza. 11 Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. 12 Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. 13 Por tanto, tomen toda la armadura de Dios, para que puedan resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes. Estad, pues, firmes. . . .”

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