Dios Hace De Sus Ministros Una Llama De Fuego

DIOS HACE DE SUS MINISTROS UNA LLAMA DE FUEGO

Porque nuestro 'Dios es un fuego consumidor' (Hebreos 12:29) , "Que hace de sus ángeles espíritus, y de sus ministros llama de fuego". (Hebreos 1:7).

Cuando somos llamados al ministerio como siervos de Dios, tenemos el deber de someternos al amor de Dios y abrirle nuestro corazón. Él entra en nosotros y se convierte en un fuego consumidor, no para nosotros mismos, sino para el mal que llevamos dentro. De modo que, en un sentido muy profundo y bendito, puede decirse que habitamos con el fuego devorador, y que caminamos en medio de las quemaduras eternas.(M. B. Meyer, B. A.)

Él nos dio los dones necesarios para funcionar en el oficio al que nos ha llamado. "De la manera que cada uno ha recibido el don, así también ministrad lo mismo los unos a los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios". (1 Pedro 4:10-11). Dependemos de Dios para que nos sustente y nos guíe para tener éxito y obedecer todos sus mandamientos. Mientras tanto, no podemos hacer estas cosas sin la ayuda de Dios: "Porque el reino de Dios no consiste en palabras, sino en poder". (1 Corintios 4:20). Aunque actuamos en el nombre de Jesús, ante el que toda rodilla debe doblarse, también recibimos diariamente la guía del Espíritu Santo para que nos revele los misterios del Cielo y nos guíe adecuadamente en este mundo.

El Señor quiere encender a sus ministros como llamas de fuego y ponerlos sobre las naciones y los reinos, para desarraigar y derribar, para destruir y arrojar, para edificar y plantar. "Nadie podrá detenerlos (Hechos 28:31).

UNA LLAMA DE FUEGO

Una llama es la parte visible y gaseosa de un fuego. No puede haber llama sin el fuego, "porque nada podéis hacer sin mí" (Juan 15:5). La fuente de nuestras llamas no debe extinguirse. "Sed sobrios y velad, porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda buscando a quien devorar". (1 Pedro 5:8).

Las llamas de un fuego tienen varios colores diferentes. Los colores de las llamas representan las diferentes sustancias que se están quemando en el fuego. Los fuegos más calientes arden con más energía, por lo que tienen colores diferentes a los fuegos más fríos. Aunque el rojo suele significar calor o peligro, en los incendios indica temperaturas más frías. Mientras que el azul representa colores más fríos para la mayoría, es lo contrario en los incendios, lo que significa que son las llamas más calientes. Cuando todos los colores de las llamas se combinan, el color es blanco-azul, que es el más caliente. ¿Cuál es el color y la intensidad de nuestra llama en Dios? ¿Es azul o roja?

"La obra de cada uno se pondrá de manifiesto; porque el Día la declarará, ya que será revelada por el fuego; y el fuego probará la obra de cada uno, de qué clase es". (1 Corintios 3:13)

PORTADORES DE LLAMAS

Hay tres tipos de portadores de llamas:

1. LOS QUE TIENEN UNA LLAMA BAJA

Cuando no te gusta lo que haces, tu deseo y pasión son bajos, y nunca serás muy bueno en ello. Proverbios nos dice que una persona perezosa odia el trabajo: "El deseo del perezoso lo mata, porque sus manos se niegan a trabajar" (Proverbios 21:25); ama el sueño: "Como la puerta gira sobre sus goznes, así el perezoso gira sobre su cama" (Proverbios 26:14); da excusas: "El perezoso dice: 'Hay un león en el camino, un león feroz merodeando por las calles'" Pierde tiempo y energía: "El que es perezoso en su trabajo es hermano del que es un gran derrochador" (Proverbios 18:9 RV); se cree sabio, pero es un necio: "El perezoso es más sabio en sus propios ojos que siete hombres que responden con discreción" (Proverbios 26:16).

No son eficaces en la casa de Dios y no obtendrán nada de Él. "El alma del perezoso desea y no tiene nada"; (Proverbios 13:40, "porque Dios es remunerador de los que le buscan con diligencia" (Hebreos 11:6).

2. LOS QUE NO TIENEN LLAMA

Se quemaron, debido a prioridades equivocadas, presiones de la sociedad, o probablemente a la falta de conocimiento para llevar a cabo su deber cristiano, "Tampoco es bueno que el alma esté sin conocimiento" (Proverbios 19:2). Carecen de la pasión para impulsar el propósito que Dios les ha dado, y son como apagafuegos para otros cristianos. Ore por ellos y evítelos.

"Os ruego, hermanos, que os fijéis en los que causan divisiones y ofensas a la doctrina que habéis aprendido, y que los evitéis. Porque no sirven a nuestro Señor Jesucristo, sino a su propio vientre, y engañan el corazón de los sencillos con buenas palabras y bellos discursos."(Romanos 16:17-18)

3. LOS QUE ARDEN CON FUEGO

Son activos para Cristo, "haciendo los negocios de su padre celestial" (Lucas 2:49). Jesús sabía lo que estaba llamado a hacer, y se negó a permitir que nada se interpusiera en su camino. Alinear tus prioridades con tu pasión te permite afrontar los problemas con mayor energía y entusiasmo. Tu llama siempre arderá con más fuerza cuando persigas activamente tu ministerio y derrames tu vida en los demás.