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Y AL FINAL…

2 Samuel 22:1

1 Habló David a Jehová las palabras de este cántico, el día que Jehová le había librado de la mano de todos sus enemigos, y de la mano de Saúl.

I. UBICÁNDONOS EN EL TIEMPO

David escribe este Salmo poco antes de ser nombrado rey de Israel, en momentos que ya había experimentado grandes victorias pero así mismo dificultades. Han pasado ya casi 20 años de su ungimiento como rey y en todo este tiempo Saúl y los filisteos entre otros han buscado su muerte. Se ha desarrollado y ha pasado por diferentes etapas de su vida: pastor, escudero, guerrero y ahora está listo para ser el rey de una nación.

Este capitulo describe el análisis de su vida el cual lo plasma de la mejor manera que David sabia expresarse un cántico. Este canto de liberación se repite en el Salmo 18. David reflexiona hace un análisis sobre el poder y la obra que Dios ha realizado a través de su vida durante la época que fue perseguido por Saúl y enfrentó a los filisteos. Sus momentos de prueba pero a la vez de formación.

En 2 Samuel 22 podemos ver algunos principios espirituales que David declara en esta alabanza los cuales son aplicables en nuestras vidas y nos dejan una gran enseñanza:

II. PRINCIPIO PARA LA VICTORIA

1. CUANDO LOS TIEMPOS SON INSEGUROS, DIOS ES NUESTRA ÚNICA SEGURIDAD.

2 Samuel 22:2-3

2Dijo: Jehová es mi roca y mi fortaleza, y mi libertador;

3 Dios mío, fortaleza mía, en él confiaré; Mi escudo, y el fuerte de mi salvación, mi alto refugio;

Salvador mío; de violencia me libraste.

Estas metáforas de la protección divina están estrechamente relacionadas con la experiencia personal de David. Hay una triple declaración en el versículo 2: Jehová es mi roca, mi fortaleza y mi liberación. David declara quien es Dios para él.

• Roca: era un lugar de protección en las batallas.

• Fortaleza: una cumbre era una fortaleza natural en el tiempo de David; las ciudades localizadas a una gran altura eran difíciles de penetrar.

• Libertador: significa libertar, escapar o salvar; como referencia a la liberación que Dios da.

Todas las palabras que salen de su boca son declaraciones de en quien está puesta su confianza. Dios es su: Roca, Fortaleza, Escudo, Fuerte de salvación, Alto Refugio, Salvador. Es interesante que no solo está describiendo los atributos de Dios sino que los ha visto activos a favor de él, su relación con Dios es de intimidad “MI Dios”, “MI Roca”, “MI Fortaleza”, “MI Escudo”. Solo en Dios estamos completamente seguros. David comprobó los beneficios de estar bajo la cobertura de Dios.

Todas las circunstancias en nuestras vidas nos forman tanto las positivas como las negativas. Ante lo negativo tenemos dos caminos que tomar: aprender de ellas y tomar cada obstáculo como formadores de nuestro carácter, oportunidades de cambios o dejar que éstas nos hundan y vivir una vida de derrota.

David es un claro ejemplo de un hombre que paso momentos de inseguridad en su vida, muchos quisieron su muerte, fue traicionado por los que más amaba, su ambiente no fue el mas favorable pero el tomó este tiempo difícil para formarse y prepararse. Cuando llegó al trono de Israel él ya era un gran guerrero formado en la escuela de la vida.

Lo que vemos en estos versículos es la voz de la experiencia hablando de las características del Dios a quien servimos. Solo el hombre que camina con Dios le conoce y puede tener una confianza plena en su poder. En los tiempos de inseguridad se manifestará en quien está puesta tu confianza y de que manera tu ves a Dios. Dios no era un concepto en la vida de David. Cuando los tiempos se vuelven difíciles en nuestras vidas no es tiempo de hacer análisis negativos, declarar derrota o quejarnos, mucho menos murmurar de estas circunstancias. Dios no nos ha prometido una vida sin batallas más bien su promesa es que él estará con nosotros todos los días de nuestras vidas. En los momentos de dificultad descubrirás a Dios es su aspecto protector. Son tiempos en que la intimidad con él se volverá mas estrecha. En los momentos de crisis sale a flote lo que realmente hay en nuestro interior, ¿Qué está saliendo de ti? Alabanza o queja. Podemos decir como David: Mi Dios o ¿le vemos como alguien lejano?

2. CUANDO SIENTES QUE ES TU FINAL – CLAMA A DIOS.

2 Samuel 22:4-7

4 Invocaré a Jehová, quien es digno de ser alabado, y seré salvo de mis enemigos.

5 Me rodearon ondas de muerte, y torrentes de perversidad me atemorizaron.

6 Ligaduras del Seol me rodearon; Tendieron sobre mí lazos de muerte.

7 En mi angustia invoqué a Jehová, Y clamé a mi Dios; El oyó mi voz desde su templo, y mi clamor llegó a sus oídos.