Mantenerse En El Buen Camino (Parte 1) Series

En nuestro estudio de Filipenses, nos encontramos en los últimos siete versículos del capítulo 3. En los versículos anteriores a este texto, Pablo introdujo la metáfora de correr una carrera como se corre en las Olimpiadas. Su instrucción allí fue que mantengamos nuestra atención en la línea de meta; no miremos hacia atrás; corramos diligentemente para ganar el premio que tenemos por delante. El premio es Cristo. El premio es conocer a Cristo más y más profundamente.

En nuestro texto de hoy, Pablo da más instrucciones para correr esa carrera. Aquí enfatiza en mantenerse en el camino. Para ganar, un corredor debe mantenerse en el camino. No debe salirse de la pista. No debe desviarse de su carril. En consonancia con ese tema, he titulado este mensaje “Mantenerse en el camino”.

A lo largo de los años, he visto a muchas personas comenzar su carrera con celo, solo para desviarse en algún punto del camino. i Algunos se desviaron por algún placer mundano o ambición personal. ii Otros se desviaron por una falsa doctrina.

Hay numerosas cosas que pueden captar la atención del cristiano y robarle el premio. Escuché a una celebridad cuyo nombre es bien conocido por todos aquí. En su adolescencia tardía fue gloriosamente lleno del Espíritu Santo. Él lo describió como “una experiencia única en la vida”. Nunca rechazó esa experiencia. De hecho, ahora en sus últimos años lo está afirmando públicamente. Pero sí indica que no siempre mantuvo esa relación con Dios como algo central en su vida. Durante muchos años su tiempo y energía se consumieron en gran medida en la actuación. Y tuvo mucho éxito en eso. Podemos desviarnos de nuestra carrera, y cuanto más exitosos somos, más tentados estamos a invertir más en el esfuerzo. Alabo a Dios porque esta persona famosa tiene el coraje de testificar públicamente sobre su experiencia con Dios. Eso no es fácil de hacer en el ambiente de Hollywood. Su nombre es Denzel Washington, y pueden escuchar su testimonio en YouTube. iii

He conocido a personas que se desviaron de su carrera con algún pasatiempo que simplemente les quitaba cada vez más tiempo y energía. Un hombre talentoso que conocí amaba correr motos. Era muy bueno en eso. Ganó muchos trofeos. Pero eso lo mantenía fuera de la iglesia los fines de semana. Conocía al Señor, pero ese pasatiempo le quitaba mucho más tiempo y atención que correr la carrera de la que habla Pablo en Filipenses 3. No tengo ninguna duda de que lo veré en el cielo. Pero la cuestión es “lo que podría haber sido”. Me pregunto qué habría hecho Dios a través de ese hombre si no se hubiera desviado. No tiene por qué ser algo malo. Simplemente tener las prioridades equivocadas puede causarlo. En el Sermón del Monte, Jesús nos dijo que busquemos primero el reino de Dios. Debemos hacer de nuestra búsqueda de Dios lo número uno. Cualquier cosa que no sea eso puede desviarnos del camino.

Las desviaciones más desgarradoras que he visto ocurren cuando alguien es engañado por una enseñanza falsa. Eso no sucede de la noche a la mañana, y siempre hay algo más involucrado que un simple malentendido intelectual. El engaño es más un problema del corazón que un problema intelectual. Es por eso que Proverbios 4:23 dice: “Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón. . . ”iv

El orgullo espiritual es a menudo el preludio del engaño doctrinal. Es difícil ayudar a una persona que está engañada con una doctrina falsa. El orgullo que acompaña al engaño a menudo hace que piense que sabe más que la persona que intenta corregirla. Conocí a una pareja en una iglesia a la que asistía que decidió que ya estaban en un estado glorificado de perfección. No vi ninguna gloria emanando de sus cuerpos. Me sorprendió que alguien pudiera llegar a esa conclusión. Pero nadie pudo persuadirlos de lo contrario, aunque las Escrituras y la experiencia práctica confirman que no es cierto. Sentían que habían sido especialmente elegidos por Dios para recibir esta revelación. Sentían que tenían un “conocimiento superior” que el pastor y otros líderes. El engaño hizo naufragar la vida de las personas.

Pablo hace tres cosas en nuestro texto que pueden ayudar a los cristianos a mantenerse en el buen camino.v Creo que son particularmente importantes en los tiempos en que vivimos hoy.vi

(1) Llama a las personas a abrazar lo que ha dicho en este capítulo (vs 15-17).

(2) Advierte a los cristianos contra los maestros que podrían engañarlos (vs 18-19).

(3) Confirma el destino del cristiano en Cristo como el enfoque de sus vidas (vs 20-21).

I. El LLAMADO de Pablo a estar de acuerdo con lo que ha dicho antes de esto:

Fil. 3:15-17: “Así que, todos los que somos perfectos, esto mismo sintamos; y si otra cosa sentís, esto también os lo revelará Dios. 16 Pero en aquello a que hemos llegado, sigamos una misma regla, sintamos una misma cosa. 17 Hermanos, sed imitadores de mí, y mirad a los que así se conducen según el ejemplo que tenéis en nosotros”.