Los Salmos 38
Oración Del Pecador Contrito
Salmo de David. Para conmemorar.
Ni me castigues en Tu furor.
Y sobre mí ha descendido Tu mano.
En mis huesos no hay salud a causa de mi pecado.
Como pesada carga, pesan mucho para mí.
A causa de mi necedad.
Y ando sombrío todo el día.
Y nada hay sano en mi carne.
Gimo a causa de la agitación de mi corazón.
Y mi suspiro no te es oculto.
Y aun la luz de mis ojos se ha ido de mí.
Y mis parientes se mantienen a distancia.
Los que procuran mi mal hablan de mi destrucción,
Y traman traición todo el día.
Soy como el mudo que no abre la boca.
Y en cuya boca no hay réplica.
Tú responderás, Señor, Dios mío.
Los que, cuando mi pie resbala, se engrandecen sobre mí”.
Y mi dolor está continuamente delante de mí.
Afligido estoy a causa de mi pecado.
Muchos son los que sin causa me aborrecen.
Se me oponen, porque yo sigo lo bueno.
Dios mío, no estés lejos de mí.
Oh Señor, salvación mía.