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Summary: Hay un solo camino al cielo, pero nos encontramos en muchas i-griegas y entronques. Uno debe de escoger bien la senda que pueda benefeciar a su vida espiritual.

Viajando en el Camino Correcto

Prov. 12:28 - En el camino de la justicia está la vida; y en su sendero no hay muerte.

¿Hasta dónde ha viajado en tu jornada espiritual?

Es un solo camino, pero hay varios entronques y de repente hay i-griegas.

La verdad es que hay ciertos caminos que uno tiene que pasar más que una sola vez.

Los israelitas repitieron en algunos de los caminos en su jornada hacia la tierra prometida.

Somos peregrinos en busca de nuestro hogar celestial.

I. El Camino a Damasco = el camino de cambio

Hch. 9:1-6

1 Y Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, fue al sumo sacerdote,

2 y pidió de él cartas para las sinagogas de Damasco, para que si hallase algunos de este Camino, ya fuesen hombres o mujeres, los trajese presos a Jerusalén.

3 Y yendo por el camino, aconteció que llegando cerca de Damasco, súbitamente le cercó un resplandor de luz del cielo;

4 Y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?

5 Y él dijo: ¿Quién eres, Señor? Y el Señor dijo: Yo soy Jesús a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.

6 Y él, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer.

En este camino, Saulo recibió un cambio, y llegó a ser Pablo.

Hay muchas posibilidades que pueda traer cambios en nuestra vida.

1. cambios geográficos

2. selección de trabajo o carrera

3. el matrimonio

4. selección de compañeros (íntimos)

II. El Camino a Emaús = el camino de compañerismo

Lucas 24:13-35

Dos varones desanimados caminan con Cristo sin reconocerle.

Hablaron con El y de El por un buen rato.

Por fin, se abrieron sus ojos.

Cuantas veces Cristo camina a nuestro lado y no le reconocemos. Todo el tiempo, su misión es de animar a aquellos que andan atribulados.

III.El Camino de Jericó = el camino de Servicio

Lucas 10: 30-37

El Buen Samaritano

En el camino que Dios nos ofrece, siempre va a ver "puertas abiertas" para ministrar.

Uno tiene que abrir sus ojos espirituales y su corazón para reconocer la necesidad.

Que deja de pensar en número uno por un ratito. De seguro hay otros sufriendo más que ti.

IV. El Camino a Jerusalén = el camino de Sufrimiento

Mateo 16:21 - Desde aquel tiempo comenzó Jesús a declarar a sus discípulos que le era necesario ir a Jerusalén y padecer mucho de los ancianos, y de los príncipes de los sacerdotes y de los escribas; y ser muerto, y resucitar al tercer día.

Cristo nos mostró el ejemplo.

Heb. 12:2 - puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual, por el gozo puesto delante de Él sufrió la cruz, menospreciando la vergüenza, y se sentó a la diestra del trono de Dios.

2a. Tim. 3:12 - Y también todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús, padecerán persecución.

La madurez viene por el padecer.

Al mejor, nuestro pensamiento inicial es de evitar a este camino.

1a. Pedro 5:10 - Y el Dios de toda gracia, que nos ha llamado a su gloria eterna por Cristo Jesús, después que hubiereis padecido un poco de tiempo, Él mismo os perfeccione, afirme, corrobore y establezca.

V. El Camino para el Remanente = el camino fuera de Egipto

Isa. 11:16 - Y habrá camino para el remanente de su pueblo, que habrá quedado de Asiria, de la manera que lo hubo para Israel el día que subió de la tierra de Egipto.

Dios ha llamado a todos de sus santos de salir de Egipto (el mundo).

El mundo no es nuestro hogar.

Es un camino de santificación.

2a. Co. 6:17 - Por lo cual salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor, y no toquéis lo inmundo; y yo os recibiré,

Colosenses 2:21 - tales como: No toques, no gustes, no manejes

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