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Introducción:

Leamos todos juntos, Génesis 18:16 – 19.

La razón que Dios va a bendecir a Abraham es porque Dios sabía que Abraham iba hacer lo correcto; es decir que cuando no se hace las cosas bien no hay bendición de Dios.

Dios nos ha dado una responsabilidad.

El hecho de que decimos que vivimos por fe no trae automáticamente la bendición de Dios. Dios es un dios de orden y hay condiciones en cuanto a la responsabilidad. El texto dice si me sirves; Dios conocía a Abraham y sabia que el iba estar dispuesto a sacrificar a su único hijo mas luego.

I. Desanimo

Exposición: Para poder entender la bendición de Dios en la vida de David, tenemos que primero observar que estaba sucediendo en los capítulos anteriores.

Explicación: David llega a un punto en su vida donde se cansa de estar huyéndole a Saúl y en el capitulo 27 de primera de Samuel, vemos que el se rinde y dice, “iré a la tierra de los filisteos y morare allí”.

Aplicación: Hay momentos en la vida en que Dios esta listo para bendecirnos pero nos vienen momentos de desanimo. Nótese que David se rinde en el mismo lugar donde había obtenido su mayor victoria.

No puedes depende de tu mayor victoria de ayer.

A veces queremos relevo en vez de seguir peleando. Dios te dice hoy, tu bendición esta a la vuelta de la esquina. No te rindas porque te voy a bendecir a pesar de tu circunstancia (Gn. 26:12). (Decisiones).

II. Desenfreno

Exposición: Si miramos al capitulo 27 muy cautelosamente, vamos a encontrar a David en Gat. Cuando habla con el rey filisteo Aquis, David le pide al rey un lugar donde morar y el rey le da a Siclag.

Explicación: Recordemos que este es el lugar de los enemigos pero David mora allí por 16 meses con sus hombres (600). Dice la Biblia que comienzan a aniquilar a todos los de la tierra incluyendo a las mujeres. Cuando David regresa a presentarse delante del rey, actúa como si nada hubiera pasado y engaña al rey.

Aplicación: Tenemos que entender que cuando nosotros nos entregamos al enemigo, oseas, nos rendimos, ya el enemigo no nos persigue. Saúl dejo de perseguir a David. David comienza a pensar que todo esta bien.

No pienses que porque tienes dinero que estas en la voluntad de Dios.

David comenzó a depender de sus propias fuerzas.

Tenemos que cuidar de lo nuestro y hacer como manda la escritura.

Proverbios 22:15, “La necedad está ligada en el corazón del muchacho; Mas la vara de la corrección la alejará de él.”

Proverbios 23:13 – 14, “No rehúses corregir al muchacho;

Porque si lo castigas con vara, no morirá. 14 Lo castigarás con vara, Y librarás su alma del Seol.”

Hebreos 12:7 – 9, “Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a hijos; porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina? 8 Pero si se os deja sin disciplina, de la cual todos han sido participantes, entonces sois bastardos, y no hijos. 9 Por otra parte, tuvimos a nuestros padres terrenales que nos disciplinaban, y los venerábamos. ¿Por qué no obedeceremos mucho mejor al Padre de los espíritus, y viviremos?”

III. Derrota

Exposición: En el capitulo 29 vamos a encontrar que las fuerzas de los filisteos se unieron a pelear contra Israel. Que problema se encuentra David. ¿Cómo David puede ir y pelear contra su gente? Cuando están listos a ir a la batalla, uno de los principies filisteos reconoce a David como el hombre de quien cantaban, “Saúl hirió a su miel y David a sus diez miles.”

Explicación: Tenemos que entender que David ahora estaba con el favor del rey Aquis de los filisteos y el rey le dijo que pelease en la retaguardia. Mientras tanto, los amalecitas entraron a Siclag y destruyeron la ciudad y se llevaron a todos allí cautivos.

Aplicación: Que interesante que el enemigo, después que te da lo que le pides, el mismo te entrega. El mismo enemigo que te dio todo ahora te lo quita todo.

Los mismos de David ahora querían apedrearlo.

¿Qué sucede? En el capitulo 30 verso 7 vemos lo que sucede.

David se humilla y pide el efod.

**LAS DECISIONES QUE TOMAMOS AFECTAN, NO SOLO A NOSOTROS SINO TAMBIEN A LA FAMILIA.**

Conclusión:

Dios nos ha entregado todo lo que el enemigo nos ha robado. El nos dice hoy, ve y recuperarlo todo. Aunque quizás fue culpa nuestra que el enemigo pudo entrar y quitarnos a los hijos, quitarnos la paz, quitarnos nuestras finanzas, hoy Dios dice ve y pelea porque vas a RECUPERARLO TODO en el nombre de Jesús.