Raíces

Raíces

Hechos 2:1-4

Introducción:

En el libro Raíces, Alex Haley traza su genealogía a través de muchas generaciones. Más tarde, al estar buscando el pasado de su madre, el libro Alexander Haley’s Queen, él murió. Después de su muerte se supo que había sido adoptado. Lo que él pensaba que eran sus raíces no lo eran.

Nosotros como Pentecosteses tenemos raíces y no hay duda ninguna acerca de su exactitud. Están claramente asentadas en las Escrituras, e indican de dónde venimos, nos revelan cómo comenzamos, por qué en el mundo hay muchos Pentecosteses hoy y lo que debe ser nuestro reto futuro.

1. El calendario de Dios.

A. "Y cuando vino del día de Pentecostés. . ." (Hechos 2:1)

a. Más que un hecho histórico

b. Indica el tiempo preciso de Dios (Juan 2:4; 7:30; Gálatas 4:40)

B. Dos requisitos para el Pentecostés

a. Jesús había de ser glorificado (Juan 7:37-39) y sólo Dios podía hacer esto.

b. El hombre debía estar listo para recibir, sólo el hombre puede hacer esto.

2. La condición del hombre

A. "Estaban todos unánimes juntos", (Hechos 2:1)

B. Los 120, como una gran sinfonía, estaban afinados a Dios y el uno al otro. Estaban en armonía.

C. Los días de espera habían sido necesario para este fin.

3. La manifestación de Dios

A. Hechos 2:2, 3

B. Cuando el hombre se prepara, Dios ya esta listo

C. Dios es un Dios de acción inmediata (Marcos 13:36; 1ª Corintios 15:52)

D. De repente, como estruendo de un viento recio y las lenguas como de fuego sobre sus cabezas, ambos símbolos del Espíritu Santo, que por fin había sido enviado.

4. La experiencia del hombre

A. Hechos 2:4

B. Dos cosas de gran significancia

a. "Fueron llenos" con relación a "Estaban todos unánimes juntos". Dios quiere que todos seamos llenos (Hechos 2:39; 4:31; 8:17; 10:44; 19:6,7)

b. "Todos comenzaron a hablar en otras lenguas".

Conclusión: Aquí, las raíces del Pentecostalismo, se estableció un precedente para todo el que recibiera la plenitud del Espíritu Santo. Todos hablan otras lenguas. Desde nuestras raíces aprendemos que cuando el hombre satisface las condiciones, Dios está listo para derramar de Su Espíritu, y cuando Su Espíritu se derrama sucede lo sobrenatural.