Summary: El tema de la salvación es de vital importancia para cada persona que escucha mi voz y para el mundo entero. Porque lo que tu hagas con tu salvación, determinara donde pasaras la eternidad.

¿Puede Dios realmente salvar tu alma?- Parte 2

Juan 3:16-17 “16Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. 17Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él.” (RVR1960)

Este pasaje detalla la conversación entre el Señor Jesús y Nicodemo.

Y el Señor dice muy claramente, que Él vino al mundo a proveer salvación a todo ser humano.

El tema de la salvación es de vital importancia para cada persona que escucha mi voz y para el mundo entero.

Porque lo que tu hagas con tu salvación, determinara donde pasaras la eternidad.

Antes de profundizarnos mas en el mensaje quiero primero ofrecer una definición.

La palabra que quiero definir el día de hoy, es la palabra que uso Jesús en el versículo 17.

Jesús nos dice que Él no vino al mundo para condenarlo, sino para que el mundo sea salvo por Él.

Es la palabra “salvo” la que quiero considerar por un momento.

Nosotros decimos esa palabra en nuestros sermones y en nuestros testimonios, pero los que no son salvos posiblemente no entienden cuando usamos esa palabra.

La palabra “salvo”, viene de la palabra griega “sozw” (se pronuncia Sode- zo).

Esta palabra literalmente significa: “salvar, mantener sano y salvo, rescatar del peligro y destrucción”.

Entonces, si esta palabra tiene ese significado, ¿Porque la usamos en relación a nuestra alma?

Porque el ser humano en su estado natural, es pecador. Romanos 3:23 dice “23pues todos han pecado y están privados de la gloria de Dios” (NVI)

Y cuando venimos a este mundo, llegamos ya con una sentencia de muerte. Romanos 6:23ª “23Porque la paga del pecado es muerte…” (NVI)

Y a menos que la persona sea “salva”, morirá en sus pecados y pasara el resto de la eternidad en el infierno por siempre, separado de la presencia y poder del todopoderoso Dios.

Ahora, nadie en sus cinco sentidos quiere que eso les pase. Entones es importante saber como poder ser salvo.

Ya que sabemos lo que significa ser salvos, todo lo que queda es una pregunta.

¿Puede Dios realmente salvar tu alma?

Esa es la pregunta que quiero responder hoy.

Yo digo, ¡Si, Él puede! Déjame darte tres razones.

I- La promesa de Dios para salvar

A- Es una promesa antigua

En el principio, cuando Dios hizo al hombre a Su imagen y el hombre decidió pecar contra el Señor, Dios le hizo una promesa a Eva en el Jardín del Edén.

Génesis 3:15 “15Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar.” (RVR1960)

Fue la promesa de proveer una manera de salvación.

Ahora, la promesa de Dios para proveer salvación es más antigua aun que eso.

Apocalipsis 13:8b “…del Cordero que fue inmolado desde el principio del mundo.” (RVR1960)

Y Pedro lo profundiza aun mas, 1 Pedro 1:20 “20Cristo, a quien Dios escogió antes de la creación del mundo, se ha manifestado en estos últimos tiempos en beneficio de ustedes.” (NVI)

Estos versículos nos dicen que antes que hubiera un pecador para salvar, antes que hubiera pecado que limpiar, el Señor ya había formulado un plan para redimir a los pecadores.

Su plan es un plan más viejo que el ser humano, que el pecado, que Satanás y que el Infierno.

Entonces, la promesa de Dios para salvar, es una promesa antigua que nunca fracasara.

La promesa de Dios para salvar es tan antigua como Dios mismo, y es tan nueva como el día que clames a Él para creer por fe.

B- Es una promesa continua (actual)

Aunque la promesa de Dios es más antigua que el ser humano, todavía tiene el poder del Todopoderoso detrás de ella.

La promesa es tan valida hoy como lo ha sido siempre.

Juan 5:24 “24Ciertamente les aseguro que el que oye mi palabra y cree al que me envió, tiene vida eterna y no será juzgado, sino que ha pasado de la muerte a la vida.” (NVI)

Esta promesa no ha, ni nunca perderá su gran poder.

Dios es un Dios salvador y nada cambiara esa verdad.

C- Es una promesa abierta

La promesa de Dios para la salvación no esta limitada para algunos selectos, sino que es una promesa que es ofrecida a todo ser humano.

Apocalipsis 22:17 “17Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.” (RVR1960)

Juan 6:37 “37Todos los que el Padre me da vendrán a mí; y al que a mí viene, no lo rechazo.” (NVI)

Es claro en estos versículos, que todo aquel que sienta la necesidad de salvación puede ser salvo por la gracia de Dios.

El único requisito para participar en el Plan de Salvación de Dios, es ser un pecador.

Marcos 2:17 “17Al oír esto Jesús, les dijo: Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. No he venido a llamar a justos, sino a pecadores.” (RVR1960)

Es un hecho que todos somos pecadores, entonces todos nosotros calificamos bajo los términos de la salvación.

El problema es, que no todos están dispuestos a admitir su culpabilidad.

Pero la Biblia nos dice que estamos en una condición triste al estar apartados de Dios.

Isaías 53:6 “6Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros.” (RVR1960)

En términos simples, necesitamos lo que Dios tiene para ofrecernos en su plan de Salvación.

II- El poder de Dios para Salvar

Ahora que sabemos que el Señor ha prometido salvar aquellos que reciban Su plan de salvación, necesitamos saber que Él puede hacer lo que Él dice que ara.

Cuándo el pecador va hacia Dios por su salvación ¿Cómo puede saber que Dios hará lo que Él ha prometido?

Él tiene el poder de convertir al pecador

Cuando el pecador coloca su fe en el Señor Jesucristo para su salvación, Dios hace un trabajo de gracia tan poderoso en su vida, que no se puede explicar en términos humanos.

Cosas de una profunda naturaleza espiritual que asombra la mente.

Déjame listar algunas de ellas para que te ayude ha entender lo que estoy diciendo.

A- Todo pecado es inmediatamente y completamente perdonado.

Salmo 103:12 “12Cuanto está lejos el oriente del occidente, Hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones.” (RVR1960)

Isaías 43:25 “25Yo, yo soy el que borro tus rebeliones por amor de mí mismo, y no me acordaré de tus pecados.” (RVR1960)

B- El pecador viene hacer un hijo de Dios.

1 Juan 3:1 “1¡Fíjense qué gran amor nos ha dado el Padre, que se nos llame hijos de Dios! ¡Y lo somos! El mundo no nos conoce, precisamente porque no lo conoció a él.” (NVI)

C- El pecador es liberado del pecado.

1-Del poder del pecado.

Romanos 6:14 “14Así el pecado no tendrá dominio sobre ustedes, porque ya no están bajo la ley sino bajo la gracia.” (NVI)

2- De la pena del pecado.

Romanos 5:9 “9Y ahora que hemos sido justificados por su sangre, ¡con cuánta más razón, por medio de él, seremos salvados del castigo de Dios!” (NVI)

D- El pecador llega hacer un coheredero con Jesucristo.

Romanos 8:17 “7Y si somos hijos, somos herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, pues si ahora sufrimos con él, también tendremos parte con él en su gloria.” (NVI)

E- El pecador hereda una mansión celestial.

Juan 14:2-3 “2En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. 3Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis.” (RVR1960)

F- El pecador se convierte en un santo.

Cuando Jesús te salva, Él te cambia para siempre.

2 Corintios 5:17 “17Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. ¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo!” (NVI)

III- La provisión de Dios para salvar

A- Él ha provisto un precioso substituto

Cuando el hombre peco en el jardín, el hombre cayó bajo la maldición de Dios.

Para que el hombre pueda ser redimido, un hombre tenía que morir. Más sin embargo, no cualquier hombre era suficiente.

El hombre que muriera tendría que ser un hombre perfecto. Uno sin pecado y sin maldad.

Dios sabiendo nuestra necesidad y nuestra inhabilidad de poder hacerlo por nosotros mismos, proveyó un perfecto substituto.

Él nos dio Su único hijo, el Señor Jesucristo.

De hecho el regalo de Dios en Cristo, prueba el amor de Dios para ti y para mí.

Juan 3:16 “16Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.”

Pueda que no lo entiendas hoy, pero cuando Jesucristo murió en la cruz, Él literalmente estaba tomando tu lugar. Él estaba muriendo por ti y por mí.

Cuando Jesús estaba en la cruz, Dios transfirió tus pecados a Jesús y Él murió para pagar el precio en la cruz.

2 Corintios 5:21 “21Al que no cometió pecado alguno, por nosotros Dios lo trató como pecador, para que en él recibiéramos la justicia de Dios.” (NVI)

B- Él ha provisto un perfecto sacrificio

Cuando Jesús estaba en esa cruz, su muerte y sacrificio fueron suficientes para proveer la necesidad salvadora del mundo entero.

Él se entrego a si mismo, una vez por todas, para que podamos ser libres de las garras del pecado y para que podamos experimentar una salvación perfecta que solo es disponible a través de el Señor Jesucristo.

Su sacrificio fue perfecto y nunca se tendrá que hacer de nuevo jamás.

Hebreos 9:24-28 “24En efecto, Cristo no entró en un santuario hecho por manos humanas, simple copia del verdadero santuario, sino en el cielo mismo, para presentarse ahora ante Dios en favor nuestro. 25Ni entró en el cielo para ofrecerse vez tras vez, como entra el sumo sacerdote en el Lugar Santísimo cada año con sangre ajena. 26Si así fuera, Cristo habría tenido que sufrir muchas veces desde la creación del mundo. Al contrario, ahora, al final de los tiempos, se ha presentado una sola vez y para siempre a fin de acabar con el pecado mediante el sacrificio de sí mismo. 27Y así como está establecido que los seres humanos mueran una sola vez, y después venga el juicio, 28también Cristo fue ofrecido en sacrificio una sola vez para quitar los pecados de muchos; y aparecerá por segunda vez, ya no para cargar con pecado alguno, sino para traer salvación a quienes lo esperan.” (NVI)

C- Él ha provisto un plan de salvación

Ahora hemos llegado a la pregunta crucial.

Si Dios prometió salvar al hombre, si Él tiene el poder de de salvarlo y si Él ha proveído la manera de salvarlo, ¿Cómo puede ser alguien salvo?

¡La respuesta es confesar y creer en Él!

Romanos 10:9-10 “9que si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor, y crees en tu corazón que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo. 10Porque con el corazón se cree para ser justificado, pero con la boca se confiesa para ser salvo.” (NVI)

Estos versículos nos dicen que para ser salvo, tenemos que reconocer las declaraciones de Cristo.

Y transferir nuestra fe que teníamos en las obras, en las religiones, en la habilidad, en nuestra justicia, en lo que sea que tenemos nuestra fe, y transferirla a Cristo Jesús y confiar únicamente en Él para nuestra salvación.

La mejor cosa que podemos hacer es, simplemente confiar en la Palabra de Dios y aceptar Su salvación por lo que es: “El Regalo de Dios”. (Romanos 6:23)

Conclusión

Posiblemente hay alguien aquí hoy que ha estado aturdido con dudas acerca de su salvación.

Posiblemente hay algunos que saben que no son salvos, y hoy el Espíritu Santo le ha hablado a su corazón y ahora estas listo para venir al Señor.

Dios esta llamando y tu conoces tu necesidad.

Te puedes estar preguntando ¿Puede Dios realmente salvar mi alma?

Quiero invitarte a descubrirlo por ti mismo, ¡Porque Dios si puede!