Avivados por la Palabra
II Crónicas 34.8-31
INTRODUCCIÓN
Suele oírse mucho hoy entre los bautistas: “necesitamos un avivamiento”, pero ¿porqué es que no llega? ¿qué falta para lograrlo? Estoy convencido que la respuesta se halla en el capítulo 34 de Crónicas.
La experiencia vivida por el Rey Josías nos enseña claramente ese elemento faltante en el avivamiento tan deseado.
Permítame leer algunos párrafos anteriores para comprender mejor lo que sucedía. 33.1-6; 21-25; 34.1-7.
Parece que Josías tenía una visión amplia de cual debía ser su trabajo, de cómo podía lograr el avivamiento, pero al parecer algo hizo que Josías perdiera algo o mucho de la visión y el avivamiento que se estaba empezando a gestar peligraba con terminarse. Pero del versículo 8 en adelante veremos como esto cambió y fue posible un avivamiento en el pueblo.
I. El rey perdió su visión. V.8-18
1. La reparación del templo.
2. Dios eso no es todo.
3. Abandono de la ley.
II. El rey recobra la visión. V.19-21
1. La ley le señalo su pecado.
2. La visión fue recobrada.
III. El rey se humilla arrepentido. V.26b-27
1. Escuchó las palabras
2. No solo escuchó, se humilló.
IV. El rey halló misericordia ante Dios. v.28
V. El rey enmendó su camino. V.29-31
1. Pactó de todo corazón y alma.
2. Poner por obra la ley.
3. Comprometió a todo el pueblo. V.30 y 32.
CONCLUSIÓN
1. Perdemos la visión fácilmente. Necesitamos avivamiento.
2. Recobremos la visión, vallamos a la palabra de Dios.
3. Humillémonos.
4. Enmendemos nuestro camino. Ver 2 Cro 7.11-14
