Summary: Cómo vivir verdaderamente ricos a los ojos de Dios

LA VERDADERA GANANCIA

1 Timoteo 6:6-11

INTRODUCCIÓN

A. Alguien ha dicho que los cuatro enemigos del pastor son: la fama (poder), la cama (pereza), la dama (sexo) y la lana (dinero).

B. Sin duda alguna, una de las luchas que enfrenta el siervo de Dios en su ministerio es el asunto de las finanzas personales. Y es que lo podemos mirar desde dos ángulos. Por un lado (la gran mayoría), están los pastores que enfrentan dificultades por no tener el dinero suficiente . Creo que hay pocos pastores que no viven constantemente preocupados por cubrir los gastos necesarios para mantener a la familia decentemente.

C. Pero también están aquellos pastores que a pesar de contar con sus necesidades básicas cubiertas ampliamente, anhelan tener más y más.

D. Esta doble dinámica presenta un reto y una tentación al siervo de Dios, que es llamado a vivir del evangelio. Ambos grupos de pastores que enfrentan el encanto del dinero, son presas de esta cualidad de no ser ambiciosos de ganancias deshonestas.

E. Así que el afán por el dinero no es exclusivo de los que tienen poco: también es un asunto de los que viven desahogadamente. El problema del amor al dinero es un problema que afecta a todo tipo de corazón.

F. Seamos honestos. A ningún niño le dan pan y llora. A ninguno de nosotros nos caería mal unos cuantos pesos de más. El llamado del dinero es seductor, y nosotros somos presa fácil.

G. Sin embargo, nuestro Dios quiere evitar que sus hijos sean presa de la seducción y nos ofrece el camino para vencer esta tentación que tanto daño hace a la obra.

H. Ese es el contexto del pasaje que quiero considerar con ustedes. En los versículos anteriores, Pablo describía el carácter de pseudopastores que hacían de piedad (o la vida cristiana) su fuente de ganancias. Dice el vr. 5: que se trataba de “hombres de mente corrompida y privados de la verdad, que tienen la piedad como fuente de ganancia”. Pablo quería advertir al joven pastor Timoteo de guardarse de esos malos ejemplos y le enseña a vivir piadosamente.

I. Honestamente, nuestros días no son diferentes a los de Pablo. Hoy también es posible encontrar en la piedad una enorme fuente de ganancias muy jugosas: accesorios, éxitos de librería, música, ropa, calcomanías, tarjetas, pañuelos ungidos, aceites bendecidos, agua del Jordán, viajes por cruceros, etc, etc.

J. Aquí en el capitulo 6 de 1ª. Timoteo el apóstol nos llama a enfrentar la tentación de la ambición, enseñándonos algunos principios de acción que nos pueden ayudar a vencerla.

K. ¿Cómo estar preparados para hacerle frente a la ambición? Veamos 4 principios fundamentales.

I. EXAMINA LOS BIENES MATERIALES A LA LUZ DE LA ETERNIDAD (7)

A. Piensen:

1. ¿Han visto alguna maleta que traigan los niños al nacer?

2. ¿Han visto algún camión de mudanzas detrás de una carroza fúnebre?

3. ¿Sabían que la ropa de los muertos no tienen bolsas?

B. Estas simples observaciones nos recuerdan que el primer paso para no dejarse dominar por la ambición es entender que por más ricos que podamos ser, nada-absolutamente nada- nos podremos llevar.

C. Pablo nos ubica en la perspectiva de lo eterno al señalarnos los dos puntos críticos en nuestra vida en la tierra y nos recuerda que así como nada trajimos al mundo, de la misma manera...nada nos llevaremos de este mundo. Esta misma idea la mencionó Job cuando dijo: “desnudo salí del vientre de mi madre y desnudo volveré allá”. Un paso firme para vencer la ambición materialista es poner los bienes materiales en la perspectiva correcta: la eternidad. ¿por qué? porque fuimos creados para vivir en ella. Una visión de las cosas en contraste con la etrnidad nos ayudará – no a evitarlas por completo, pero sí a no poner nuestra esperanza y gozo en ellas.

D. Ningún chip del teléfono celular más sofisticado, ni una pieza del motor del automóvil deportivo más caro; ni siquiera la llave de la mansión más lujosa nos podremos llevar después de la muerte.

E. Es en la eternidad donde las posiciones sociales y económicas se nivelan. Allí nadie tiene más posesiones que los demás. Es más, no hay posesiones materiales. Después de todo, en la eternidad sólo contarás con una sola cosa: alma, tu corazón, tu relación con Dios.

F. Es por ello que Pablo nos enseña el siguiente principio...

II. VIVE CON SENCILLEZ (8)

A. Vivimos en una era de grandes avances en todos los campos de la vida humana, en la que somos bombardeados sin piedad por una avalancha de opciones para hacernos la vida más fácil, más placentera, más cómoda.

B. Todas esas opciones son como voces que se esfuerzan por conseguir nuestra atención y nuestro dinero; y vaya que consiguen lo que desean: llegamos a pensar que necesitamos de más cosas para estar bien.

C. En el terreno de la mercadotecnia se llama crear una necesidad.

D. Si tenemos Sed, podemos tomar agua o un refresco embotellado; Si tenemos hambre, podemos comer pan o pizza, o hamburguesa; entretenimiento: salir a caminar a un parque-- ir a los "Malls" y entrar al cine.

E. En este vrs., Pablo nos llama a un estilo sencillo de vida, que consiste en:

1. Contentarnos con tener qué comer

2. Contentarnos con tener qué vestir

F. Es decir, experimentar satisfacción con un estilo modesto de vida. Hay una historia muy interesante en Nuestro Pan Diario:

Un hombre de negocios muy rico esstab enojado porque notó que un pescador estaba sentado junto a su barco.

Le preguntó: “¿por qué no estás pescando?”

El pescador le dijo: “Porque ya pesqué el pescado suficiente para hoy.”

Le preguntó el rico: “Por qué no pescas más de lo que necesitas y vendes el resto?”

Le respondió el pescador: “"Y para qué?"

“Bueno, podrías ganar suficiente dinero para comprar un barco más grande para que puedas ir más lejos y obtener más pescado. Luego, con la ganancia, podrías comprar unas redes más resistentes, atrapar aún más pescado y ganar más dinero. Dentro de poco podrías tener una flotilla de barcos y ser rico como yo”

El pescador seguía recostado junto a su barquito. Y todo eso, ¿para qué?

Le respondió el millonario: Pues podrías estar sentado disfrutando plenamente de la vida.

El pescador le dijo: ¿Y qué crees que estoy haciendo precisamente ahora?

Qué gran actitud. Cuánta agitación e infelicidad pudiéramos ahorrarnos si aprendiéramos a disfrutar y apreciar lo que ya tenemos.

G. Miren, los placeres que más llenan y que Dios nos da se encuentran en dos lugares: la naturaleza y en las relaciones amorosas con la gente. ¿Quién no ha quedado maravillado ante el imponente mar? ¿Quién no ha quedado embelezado ante un atardecer o un amanecer en la playa? ¿Cuántos de ustedes no han experimentado un sentimento de por el abrazo de sus padres o de algún amigo en tiempos de dificultad? ¿Cambiarían ustedes una cena de Navidad con toda su familia por una supercomputadora?

H. En vez de aumentarla, la búsqueda de las cosas materiales disminuye dramáticamente nuestra capacidad de disfrutar de esos placeres simples y profundos.

I. No vivir con contentamiento nos pone en terrenos pone en graves peligros

III. CONSIDERA LOS GRAVES RIESGOS DE LA AMBICIÓN (9,10)

Pablo dice que la ambición deshonesta puede incluso llegar a ser la causa de destrucción de la vida. Esto es debido a que la ambición es como un tobogán:

A. Podemos caer en tentación. Stgo. Dice que cada uno es tentado cuando de su propia concupiscencia, e.d. sus propios deseos es atraído y seducido.

B. Podemos caer en la trampa del deseo. Nuestro corazón es insaciable. Nnca estamos conformes. Al principio, al adquirir algún bien material, experimentamos un sentido de satisfacción: lo disfrutamos, lo adoramos. Pero es temporal.

C. ILSTRCN. Mi regalo de Navidad: un carrito. Lo jugaba todo el día, antes de dormir y después de levantarme, iba a verlo en su lugar. Mi mamá dice que la novedad me duró unas dos semanas. El pobre carrito perdió su efecto atractivo.

D. Apenas pasa el efecto de la novedad, nos aburrimos y deseamos algo más. Juan Calvino dijo que el corazón del hombre es una fábrica de ídolos. Nunca nos conformamos con las cosas de esta vida.

E. Podemos caer en un alejamiento de la fe. Este es el principal peligro. Nuestro afán por tener más y más nos va alejando de la búsqueda de las cosas de arriba, nos aleja de la búsqueda del reino de Dios, de su justicia, de hacer su voluntad. Somos como las ovejas: nos descarriamos fácilmente.

F. Finalmente podemos caer en sufrimientos constantes y muy dolorosos. Cuantas personas que en su afán de conseguir más, han perdido lo poco que tenían.

G. Pablo le urge a Timoteo: HUYE de estas cosas. Pero le deja un último principio...

IV. BUSCA LA VERDADERA GANANCIA (11)

A. No quiero dar la impresión de que una persona que experimenta el contentamiento es una persona a la que ya no le importa crecer o desarrollarse como persona y como hijo de Dios. No se trata de eso. Una actitud de contentamiento que surge de la flojera es conformismo. Cuando tenemos contentamiento, hacemos nuestro mejor esfuerzo y confiamos en que Dios lousará en cualquier manera que él considere sabio. Nuestro contentamiento porviene de descansar en el Señor... no de no hacer nada.

B. Es extraño. Cuando se trata de las cosas materiales de esta vida, parece que nunca llegamos a un punto de contentamiento. Pero cuando se trata de nuestra vida espiritual, somo culpables de ser conformistas.

C. Por eso Pablo le dice a Timoteo que la mejor ganancia es buscar desarrollar el carácter de Cristo: la justicia, la piedad, la fe, el amor, la paciencia, la mansedumbre. Busca estas cosas primeramente.

D. Hagamos estas dos cosas: desarrollar el contentamiento y batallar contra el conformismo.

CONCLUSIÓN

A. El comercial de la tarjeta Master Card. 10 pizzas, $1200; renta de mesas y sillas, 150; pastel, 400; disfrutar tu cumpleaños con tus amigos, no tiene precio. Hay cosas en esta vida que el dinero no puede comprar. Para todo lo demás... existe el contentamiento y la piedad.

B. Mirar la eternidad, vivir con sencillez, estar alertas y buscar la piedad. Eso conforma a un hombre, o una mujer de Dios.