Factor Miedo – Parte 4
David, temor a la muerte
¿Tienes temor de morir? Algunos de ustedes dicen “absolutamente no, ni siquiera pienso en eso”; o “yo tengo tanta seguridad en el Señor, que estoy listo para irme en cualquier momento.”
Otros pueden decir, “yo no estoy aterrorizado de la muerte, pero tengo que admitirlo me da un poco de temor.”
No interesa cual sea su respuesta, la verdad del caso, es que existe mucha gente que le tiene temor a la muerte.
El temor a la muerte esta siempre listado entre las primeras tres fobias que acechan las mentes de las personas.
Nosotros los cristianos nos jactamos en decir que queremos ir al cielo, pero la verdad es que de todos modos tenemos temor de morir.
La muerte es misteriosa, es permanente, y usualmente, la muerte es hasta dolorosa; por esta razón es que es obvio tener un instinto de querer vivir.
La Biblia se refiere a la muerte como el último enemigo que debe ser derrotado y habla de personas que toda la vida han sido atados por el temor a la muerte.
Como casi todos los temores, el temor a la muerte no es del todo malo. El deseo de vivir es uno de los instintos más fuertes que Dios nos ha dado.
El temor natural de la muerte nos previene de tomar riesgos tontos, como cometer suicidio o abusar nuestros cuerpos y muchas veces nos motiva a vivir vidas santas.
Salmos 23 “1 Jehová es mi pastor; nada me faltará. 2 En lugares de delicados pastos me hará descansar; Junto a aguas de reposo me pastoreará. 3 Confortará mi alma; Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre. 4 Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; Tu vara y tu cayado me infundirán aliento. 5 Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; Unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando. 6 Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, Y en la casa de Jehová moraré por largos días.” (RVR1960)
Pocos individuos en la Biblia confrontaron la muerte más frecuentemente y más valientemente que David en el Antiguo testamento.
I- La historia de David
- Cuando David era un adolescente, el enfrento un gigante sin temor alguno.
1 Samuel 17:36-37 “36 Si este siervo de Su Majestad ha matado leones y osos, lo mismo puede hacer con ese filisteo pagano, porque está desafiando al ejército del Dios viviente. 37 El Señor, que me libró de las garras del león y del oso, también me librará del poder de ese filisteo. Anda, pues dijo Saúl, y que el Señor te acompañe.” (NVI)
- Unos años después David tuvo otro encuentro cercano con la muerte.
El rey Saúl se sentía tan amenazado por la popularidad de David, que se enojo con gran celo.
Dos veces Saúl le tiro su lanza a David, y David apenas escapo por su vida.
Mas tarde, David le dijo a su mejor amigo Jonathan, “Tu papa me esta tratando de matar”, Jonathan insistió que eso no era cierto, pero David le juro y le dijo, “Pero tan cierto como que el Señor y tú viven, te aseguro que estoy a un paso de la muerte.” (1 Samuel 20:3).
- Uno de los primeros lugares donde David huyo fue a Gat, el país del gigante Goliat que una vez había derrotado.
David pensó que como el se había convertido en el enemigo del rey Saúl, los Filisteos lo iban a recibir y proteger.
Pero los soldados le dijeron a Aquis, su rey, “Esto es muy riesgoso, no lo haga”.
Cuando su vida estuvo en la línea, David tuvo temor y tomo acciones extremas para sobrevivir.
1 Samuel 21:12-13 “12 Al oír esto, David se preocupó y tuvo mucho miedo de Aquis, rey de Gat. 13 Por lo tanto, cuando estaban por apresarlo, fingió perder la razón y, en público, comenzó a portarse como un loco, haciendo garabatos en las puertas y dejando que la saliva le corriera por la barba.” (NVI)
- No es de sorprender que muchos de los Salmos de David hablan acerca de enfrentar la muerte.
Y David entonces vivió para reinar como rey de Israel por cuarenta años y murió anciano.
II- Cuatro lecciones de la experiencia de David.
Miremos cuatro lecciones de la experiencia de David que nos ayudaran a vencer el temor a la muerte.
A- La muerte es inevitable, debes estar preparado para ella.
Es un hecho y se ha hecho estudios que, una de cada persona morirá.
Enfrenta el hecho de que algún día vas a morir, pero este seguro de estar preparado.
La cosa mas importante que tienes que hacer es, recibir a Cristo como tu salvador personal.
Una de las razones primordiales por la cual le tenemos temor al la muerte, es por que tenemos temor al juicio de Dios.
La cura para ese temor es arrepentirse del pecado, y aceptar la maravillosa gracia y perdón de Cristo.
Hebreos 2:9,14-15 “9 Pero Dios nos ama y envió a Jesús a morir para salvarnos. Por eso, aunque Dios permitió que por algún tiempo Jesús fuera menos importante que los ángeles, ahora se le rinde gloria y honor. 14 Nosotros somos seres de carne y hueso. Por eso Jesús se hizo igual a nosotros. Sólo así podía morir para vencer al diablo, que tenía poder para matar a hombres y mujeres. 15 Y con su muerte, dio libertad a los que se pasaban la vida con miedo a la muerte.
B- Acepte el hecho que un poco de temor es normal, aun si tu eres cristiano.
David escribo en Salmos 23:4ª “Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno…”
El no dijo que no temía la muerte. El dijo “Cuando pase, yo tengo la confianza que Dios estará con migo”.
Aún los cristianos mas fuetes, tienen un grado de temor a la muerte y eso es normal.
Una de las mejores cosas que podemos hacer como cristianos es de leer y memorizar las promesas en la Biblia.
Después de repetir esas escrituras, trae a memoria que Jesús nunca a hecho una promesa que El no aya cumplido. Aun esa promesa que dice que conquistaremos la tumba.
Tienes que entender y por que no repetirte a ti mismo “Señor Jesús, yo pongo mi total confianza en ti. Perdóname cuando dudo. Reconozco que tu palabra es verdad. Yo lo creo con todo mi ser”.
Pero entiende que algo de temor es normal aun para los creyentes.
C- Tenga la confianza total que Dios suplirá las fuerzas que necesitas cuando tengas que enfrentar la muerte.
Dios no quiere que vivas en temor de lo que Satanás te puede hacer.
2 Timoteo 1:7 “7Pues Dios no nos ha dado un espíritu de timidez, sino de poder, de amor y de dominio propio.” (NVI)
Entre mas cerca estemos de Cristo, menos le temeremos a la muerte y confiaremos mas en que El nos suplirá todas nuestras necesidades conforme a Sus riquezas en gloria.
D- Continuamente ponga su enfoque más en lo eterno y menos en lo temporal.
La Biblia no nos dice mucho acerca del cielo, pero tenemos lo suficiente para ansiosamente especular y anticipar.
Jesús lo llamo “la casa de mi padre” en Juan 14:1-4.
La casa de nuestro Padre va a tener algunas cosas emocionantes que ver y hacer.
El padre amoroso y celestial estará aya y le veremos cara a cara y le conoceremos aun como somos conocidos por El.
Jesús estará aya, y podremos agradecerle por Su gracia y podremos sentarnos con El y aprender de El.
Los apóstoles y patriarcas estarán aya, y nos deleitaremos en conocerlos y escuchar sus experiencias de primera mano.
Nuestros amigos y seres queridos en el Señor estarán aya, y podremos renovar nuestras relaciones con ellos.
Conclusión
El Apóstol Pablo escribió que nuestros problemas momentarios nos ayudan a alcanzar la gloria eterna, esa gloria eterna que sobrepasa esos problemas.
2 Corintios 5:1-2 “1 Sabemos que cuando se deshaga este cuerpo nuestro, esta especie de tienda de campaña que acoge a nuestra vida, Dios nos dará en los cielos un nuevo edificio, una casa eterna no hecha por manos humanas. 2 Por eso nos lamentamos, porque anhelamos que llegue el día en que seamos revestidos de aquella nuestra morada celestial. ” (CST)
Cuando la vida te da problemas momentarios y graves golpes ¿Anhelas ser revestido de tu morada celestial?
Entre más nos enfoquemos en el cielo, tendremos menos temor de la muerte.
Mi deseo y el deseo de Dios, es que todos nosotros estemos listos, para cuando llegue ese día. Y como no sabemos cuando llegara (como el drama, posiblemente mañana) la cosa mas sabia que hacer es prepararnos hoy y hacer a Jesucristo el Señor y Salvador de nuestra vida.