Consejos para una quinceañera
Eclesiastés 12:1
Como salidas de los cuentos de hadas, las adolescentes hispanas protagonizan por doquier uno de los rituales sociales más elaborados que se celebran para que las señoritas sean presentadas formalmente ante su comunidad. Pero en la actualidad las Quinceañeras representan mucho más que una vieja tradición.
Además de señalar el paso de la edad de la inocencia femenina a otra etapa de su vida de madurez, la verdad es que las fiestas de Quince Años renuevan los lazos familiares y aglutinan a su alrededor no sólo a sus amigos más cercanos, sino que también impactan a su comunidad.
Los Quince Años llegan con la expectativa que acompaña el ser ’mujer’. Ser una joven ’Quinceañera’ significa estar apta para desenvolverse con mayor libertad, incluyendo la autorización para tener novio, usar zapatillas de tacón alto, maquillarse (o al menos usar lápiz labial) entre otras cosas. A esta edad muchos privilegios son otorgados y a la vez se adquieren mayores responsabilidades.
Los preparativos a veces pueden tomar varios meses o incluso años. Pero aún cuando sólo sea una fiesta familiar pequeña y con los amigos más cercanos, el hecho no pasa desapercibido y de cualquier manera se da a conocer que la niña se está convirtiendo en mujer.
Mi deseo es que no sea en vano tanta preparación. Esta fiesta durará solamente unas cuantas horas y se esfumará el deleite, pero las palabras y lo simbólico de lo que tratemos hoy es para toda la eternidad. Cada persona presente puede apropiarse de los consejos que se darán a la festejada.
Procesión de corte y festejada con sus padres. Todos están de pie.
Damas y caballeros, nos hemos reunido aquí precisamente respondiendo a la invitación que nos hizo la familia ________. Gracias por habernos invitado a celebrar juntamente con ustedes los quince años de la Srita. _________. Me siento muy privilegiado en que me hayan pedido ministrar en este evento. La celebración de este día, es más bien una ante Dios y ustedes como testigos.
El Sr. y la Sra. ________ reconocen que su hija les fue prestada por Dios. Ellos la han criado en la mejor manera que han podido y responderán ante Dios por ello. De hoy en adelante, esta señorita deja de ser una niña y entra a la edad de la madurez. Sus decisiones ahora tendrán más peso y cordura. Es en este tiempo que más necesitará de Jesús como amigo, consejero y sobre todo como Salvador. Si enfocamos en el pasaje bíblico leído, veremos el consejo que Dios da a los jóvenes y que yo daré a esta señorita por medio de esta ceremonia. Pida que la audiencia y la corte se sienten. Que los padres pongan su vela en el candelabro. Los padres y la festejada están de pie ante el ministro.
Diríjase a los padres de la festejada. Sr. y Sra. ________, ustedes han traído a su hija ante mi como ministro de Jesucristo para pedir bendición de Dios sobre ella. Ustedes tienen unas palabras de consejo para ella. Que digan sus palabras.
Pida que se sienten los padres y la festejada.
Diríjase a la festejada. Ya que ha nacido de ti, _______, que se celebre tus quince años con un servicio religioso, te dedicaré unos objetos para que cuando tus los veas te recuerdes siempre de este día feliz y los consejos que te daré hoy.
Preséntele un alhajero en forma de manzana. Siempre se ha relacionado la manzana con la inteligencia. Probablemente esto sea por lo sucedido en el huerto del Edén cuando nuestros primeros padres, Adán y Eva, comieron del árbol de la ciencia del bien y del mal y pecaron. ¡Eso no fue nada inteligente ni sabio, fue un fracaso! Piensa en la inteligencia como un joyero. Que sirva para guardar los mandamientos de Dios, “átalos a tu cuello, para que no te olvides de ellos, andando por el camino cuando estés en tu casa, al acostarte y al levantarte” (Proverbios 3:3, Deuteronomio 6:6). Que te sirva para guardar tus compromisos, sobretodo, los que haces con tus padres y tu familia y el voto sagrado que algún día tomarás.
Preséntele la Biblia. La Biblia que te presento tiene mucho para que adquieras no solo inteligencia sino también sabiduría. La Biblia nos dice que el principio de la sabiduría es el temor a Jehová. También en la epístola de Santiago nos dice que si alguno tiene falta de sabiduría, la pida a Dios que puede dar en abundancia, puesto que Él es sabiduría. La sabiduría a que me refiero no es la sabiduría humana, sino, la sabiduría espiritual. La Biblia nos enseña que el necio dice en su corazón no hay Dios. Pero tú sé sabia y siempre ten presente que Dios está en todas partes y está listo para brindarte ayuda en el momento de tu más grande necesidad.
Hoy luces radiante con tu vestido blanco. Lo blanco en nuestra sociedad significa pureza e inocencia. En la Biblia, sin embargo, lo blanco tiene un significado muy elevado. No solamente significa pureza e inocencia, sino justicia, o sea, estar “bien delante de Dios”. El humano obtiene su justicia no por sus propias obras, sino por los méritos de Jesús, por la sangre que derramó en el Calvario por tus pecados y los míos. Es a través de la sangre de Cristo que el Padre nos considera como si nunca hubiésemos pecado. Nos presentamos delante de él con un corazón y conciencia limpia, libre de la condenación que la humanidad trajo sobre sí cuando desobedeció en el Edén. Cuando una persona dice que es “salvo”, lo que quiere decir es que es libre de la paga del pecado que es la muerte. Al aceptar a Jesús como Salvador y Señor, la Biblia dice que pasamos de muerte a vida eterna. El consejo de la Palabra de Dios es: “En todo tiempo sean blancos tus vestidos y nunca falte ungüento sobre tu cabeza” (Eclesiastés 9:8), en otras palabras, vive siempre una vida pura y justa y que nunca te falte la unción de Dios.
Preséntele la corona. La corona significa realeza. Hoy en tu día especial, eres la “princesa”. Con Cristo por tu Señor y hermano mayor puedes ser más que “princesa por un día”, puedes serlo por toda la eternidad. La Biblia nos dice que los que reciben a Cristo como Salvador les da potestad de ser hechos hijos de Dios, y si hijos, también coherederos con Jesucristo. ¿No es maravilloso que puedas ser tu coheredara con el Unigénito de Dios? Mi consejo es que busques a Cristo para recibirlo como Salvador de tu alma para que un día seas coronada con la corona de la vida y puedas reinar con Él por toda la eternidad.
Preséntele el anillo. Este anillo es simbólico también. El te recordará que Dios te ama. La Biblia dice, “Con amor eterno te he amado” (. Es por esto que en las bodas se presentan anillos como palabra de que ambos permanecerán fieles el uno al otro. Yo te aconsejo que este anillo lo hagas significar tu palabra empañada en varios niveles. Primeramente, de tu amor por Dios. Así como Él te ama, tú correspóndele obedeciendo sus mandamientos. Mantén tu vida ligada a Él. Luego, que sea símbolo de amor por tus amistades, sobre todo el “amigo” que te corteje. Muchas personas no quieren escuchar que el tener relaciones íntimas antes del matrimonio causa daño físico, mental y emocionalmente a los involucrados. El guardarte casta hasta el día de tu boda significará que te habrás guardado tan especial para “ese hombre especial” y eso es una muestra de verdadero amor. Amor que luego podrás trascender a los hijos que Dios te dará. Finalmente, este anillo puede significar el amor propio. El que te permitas elegir guardarte de una situación que después te pese o que después sientas gran culpa o incluso contraigas enfermedad. Shakespeare dijo “A ti mismo se fiel”. Mas la Palabra de Dios nos enseña que debemos serle fiel a Dios. El tener continencia significa tener auto-estima, es respetarte a ti misma y es amar a Dios quien te formó.
Pida a los padres que pasen al frente con su “regalo”. Tus padre traen un regalo que es simbólico de tu andar. Cuando eras pequeña, no escogías a dónde querías ir. Te llevaban con ellos a donde ellos iban o deseaban llevarte. Hoy te presentan tus primeras zapatillas de tacón alto. Esto significa que ellos confían que estas listas para formar metas más elevadas para ti y caminar de una manera digna, de una manera que traigas mucho contentamiento a sus corazones y mucha honra a tu familia.
Preséntele la vela decorada. Pida a los padres que ellos enciendan la vela que está en las manos de su hija con la vela que ellos han encendido previamente. Esta vela simboliza tu vida. La Biblia nos dice que debemos “brillar ante todos para que vean nuestras buenas obras y glorifiquen a nuestro Padre que está en los cielos”. Mi oración por ti es que tu hagas de tu vida un ejemplo el cual muchas niñas pequeñas quieran seguir. Puedes brillas para Dios solamente si Él habita en ti. El es tu fuente de luz. Si habitas en Dios, no estarás en tinieblas. Una vez más te insto “acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud”. Da lo mejor al maestro.
Pida que diga sus palabras de agradecimiento a sus padres, familia e invitados.
Pida que los tres se arrodillen. Haga una oración especial por la festejada y por sus padres. Concluya con la bendición pastoral:
Haga Jehová resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia. Alce Jehová sobre ti su rostro y ponga en ti paz.