Summary: Nuestro mundo abunda mucho en mentiras. Porque estamos siendo controlados por el principe de este mundo, Satanas, quien es el padre de la mentira. Pero Jesus es la verdad y nosotros podemos encontrala si la buscamos.

“Yo soy el camino, la verdad y la vida, nadie viene al padre, si no es por mi” Juan 14:6

Introducción: Jesus dijo que no nos dejemos enganar, porque vendran muchos falsos maestros y Hoy vamos a hablar acerca de buscar y conocer la verdad, para que la mentira no pueda confundirnos o hacernos desviar de nuestra Fe.

Dijimos que desde que Satanás se reveló contra Dios, se volvió el enemigo de Dios, y por consecuencia se volvió nuestro enemigo, porque nosotros somos creados por Dios a su imagen y semejanza.

Satanás no quiere aceptar que nada ni nadie pueda tener la imagen de Dios que trata continuamente de hacernos pecar para que perdamos el favor de Dios.

El salmista nos dejó en sus salmos una gran cantidad de realidades que el descubrió a través de su vida.

Ya que el pasó muchas situaciones duras y difíciles.

Es porque nosotros también pasamos situaciones duras y difíciles que nos podemos identificar con el salmista y aprender de su experiencia, los secretos para alcanzar la victoria en nuestras luchas y pruebas.

En el Salmo 43:2-5 nos explica una gran verdad acerca de Dios:

¿Por qué andaré enlutado por la opresión del enemigo?

3 envía tu luz y tu verdad; estas me guiarán;

Me conducirán a tu santo monte, Y a tus moradas.

4 entraré al altar de Dios, Al Dios de mi alegría y de mi gozo;

Y te alabaré con arpa, oh Dios, Dios mío.

5 ¿Por qué te abates, oh alma mía,

¿Y por qué te turbas dentro de mí?

Espera en Dios; porque aún he de alabarle,

Salvación mía y Dios mío.

1. La primera pregunta es: ¿Porque nosotros vivimos tristes? Porque el enemigo nos oprime v. 2

es nuestro enemigo? Satanás, quien primero demostró ser enemigo de Dios y ahora se volvió enemigo de toda la humanidad.

Oprimir significa – hacer presión o apretar demasiado algo o alguien.

El enemigo nos presiona fuertemente y nos hace sentir que no podemos resistir más.

¿Como podemos salir de nuestras ansiedades, nuestras preocupaciones, nuestras angustias? V. 3-4 Pedirle a Dios que su luz nos ilumine y su verdad la verdad nos guie.

El enemigo opera en base al engaño y la mentira.

Si logra que nos creamos sus mentiras, sufrimos, pero si descubrimos la verdad, nos damos cuenta que no era lo que el enemigo nos estaba diciendo.

¿Qué significa la frase “la luz de Dios”?

2. Juan tuvo la visión del Apocalipsis y estuvo en el cielo. El vio a Jesús: “y su rostro era como el sol cuando resplandece en su fuerza. Cuando le vi, caí como muerto a sus pies. Apocalipsis 1:16-17

La ciudad no tiene necesidad de sol ni de luna que brillen en ella; porque la gloria de Dios la ilumina, y el Cordero es su lumbrera. Apocalipsis 21:23

Quiere decir que el resplandor de Dios es suficiente para alumbrar toda la ciudad. No hace falta el sol.

A. El vio a Dios como una luz resplandeciente y a la hora de describirlo la mejor forma de hacerlo es: “Dios es luz y no hay tinieblas en El” 1 Juan 1:5

B. Nosotros necesitamos la luz. Por el día tenemos el sol y por la noche prendemos luces porque no podemos hacer nada a lo oscuro

1) Pero hay dos clases de luz: el material y la espiritual

2) Cuando estamos lejos de Dios vivimos en oscuridad, en tinieblas. No sabemos ni para donde vamos. Tropezamos y nos caemos porque no vemos por donde andamos.

3. La Biblia dice, hablando de Jesús: “Aquella luz verdadera que alumbra a todo hombre, venia al mundo” Juan 1:9

Luego dice: “Y esta es la condenación: que la luz vino al mundo, y los hombres amaron mas las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas” Juan 3:19

En su forma corporal y física, Jesús no irradiaba luz literalmente. A la verdad parecía un hombre igual a los demás. Pero en el sentido espiritual…

Jesús dijo hablando de si mismo: “Yo soy la luz del mundo y el que me sigue, no anduviera en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida” Juan 8:12

Sus discípulos vieron esa luz en él. En un sentido espiritual, Jesús tenía algo que, aunque ellos no veían con sus ojos físicos, entendían que había algo diferente en el que los atraía. Que con solo una palabra: “Sígueme” eran capaces de dejar todo atrás, su trabajo, que es la fuente de su ingreso material. Lo más importante que tenían, (las redes, el barco de pesca, el banco de cobrar los impuestos, en medio de un día de trabajo. Nada era mas importante que seguir al Maestro. Era una luz tan fuerte, que lo demás quedaba anonadado delante de Jesús.

Juan lo describe así: “Y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre; lleno de gracia y de verdad”

Pero el mundo no ha tenido esa misma experiencia. ¿Por qué? Pablo dijo: “el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios”.2 Corintios 4:4

La buena noticia la dice Juan en su primera carta: “Cristo vino para destruir las obras del Diablo. 1 Juan 3:8 ¡Hay esperanza para este mundo perdido!

Isaías lo había profetizado: “El pueblo que andaba en tinieblas vio gran luz. Y los que moraban en sombra de muerte, luz resplandeció sobre ellos” Isaías 9:2

Así que primero, Jesús llamó a los discípulos y los entrenó para que después ellos fueran la luz del mundo, llevando la luz de Dios que ahora estaba dentro de ellos por todo el mundo.

Así fue como Jesús se lo explicó a Pablo, cuando lo llamó al ministerio: “Yo entonces dije: ¿Quién eres, Señor? Y el Señor dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues. 16 Pero levántate, y ponte sobre tus pies; porque para esto he aparecido a ti, para ponerte por ministro y testigo de las cosas que has visto, y de aquellas en que me apareceré a ti, 17 librándote de tu pueblo, y de los gentiles, a quienes ahora te envío, 18 para que abras sus ojos, para que se conviertan de las tinieblas a la luz, y de la potestad de Satanás a Dios; para que reciban, por la fe que es en mí, perdón de pecados y herencia entre los santificados. Hechos 26:15-18

Aquí vemos como el enemigo trabaja para que la gente no venga a Cristo, para que no vean su luz, para que no entiendan que necesitan salvación y no tengan ningún interés en buscarlo. Pero Dios usa a sus hijos para que les abran los ojos a los perdidos y puedan salir de las tinieblas en que están, que es el dominio de Satanás, y entren a la luz de Dios que es la salvación del alma.

4. La luz de Dios ilumina nuestro entendimiento. “para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria, os dé espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de él, alumbrando los ojos de vuestro entendimiento, para que sepáis cuál es la esperanza a que él os ha llamado, y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos” Efesios 1:17-18

A. Esto es lo que Dios le había dicho a Pablo que era su ministerio: “para que abras sus ojos a fin de que se vuelvan de la oscuridad a la luz, y del dominio de Satanás a Dios, para que reciban, por la fe en mí, el perdón de pecados y herencia entre los que han sido santificados”. Hechos 26:18

B. El salmista reconocía que solo Dios puede enviarnos esa luz que haga desaparecer las tinieblas.

No una leve luz de vela que alumbra limitadamente, sino un a luz fuerte como la del sol, que disipa toda oscuridad de la noche convirtiendo la noche en día. Cuando Jesús se le revelo a Pablo en el camino de Damasco, lo único que Pablo vio fue una luz tan fuerte que cayó al suelo y por causa de la luz gloriosa de Dios, las tinieblas en que Pablo vivía se desaparecieron y los pensamientos de Pablo de perseguir a los cristianos y acabar con ellos se desapareció inmediatamente. Porque cuando prendemos la luz, la oscuridad desaparece y entonces se dio cuenta que el no sabía que tenía que hacer, por eso aquel voluntarioso hombre, que iba decidido a cumplir una misión criminal, solo puede decir humildemente: “Señor, ¿Qué tú quieres que yo haga”

El salmista había llegado a entender que solo Dios puede enviarnos esa luz, y por eso dice: Envía tu luz y tu verdad. Ellas me guiaran. Porque él se sentía triste, confundido y sin saber qué hacer.

Nosotros también debemos pedirle a Dios que ilumine nuestro entendimiento para ver las cosas como él las ve.

Nosotros también nos entristecemos con las cosas que pasan.

Nosotros también nos confundimos cuando no vemos lo que queríamos ver.

Nosotros también nos sentimos desorientados algunas veces y no sabemos ni que hacer.

C. ¡Cuánto nos hace falta que Dios envié un destello de su luz, y entendamos que no hace falta vivir por las mentiras del Diablo, cuando la verdad de Dios es lo que tenemos que tener en nuestra y nuestro corazón!

5. La luz y la verdad están combinadas:

Cuando la luz te ilumina, la verdad de Dios comienza a guiarte en la dirección correcta.

¿Qué es la verdad?

Jesús dijo: “Yo soy el camino, la verdad y la vida” Jesús es la verdad

Cuando vamos a Jesús, El mismo nos guía.

¿A dónde nos quía? El salmista sigue diciendo: A su santo monte, a las moradas de Dios, al altar de Dios.

La verdad de Dios te guía a que te acerques más a Dios mismo.

No hay nada que buscar en ningún otro sitio. Jesús es el camino, la verdad y la vida y nadie viene al padre si no es por el”

hay ninguna otra manera.

“Porque no hay otro nombre dado a los hombres en que podamos ser salvos”

la sorpresa es que cuando entras al altar de Dios, en oración, en adoración, en alabanza, en reconocimiento de quien el es. De su majestad, de su poder y de su gloria

Descubres que Dios es la fuente de todo gozo y toda alegría

Oye como lo describe el salmista: “el Dios de mi alegría, y de mi gozo”

Descubres que en su presencia hay plenitud de gozo”

Es ahí donde descubres que a pesar de lo que puedas estar pasando, todavía en la presencia de Dios encontrar gozo y alegría

Ahí descubres que, aunque no tengas nada material en este mundo, si tienes a Dios en tu corazón lo tienes todo. Porque cuando Jehová es nuestro pastor, no nos falta nada.

Él nos sustenta, él nos consuela, él nos fortalece, él nos da paz en medio de nuestras tribulaciones.

viene a ser nuestro todo, en todo lo que nos pueda pasar.

Dios tiene una manera única de impartir seguridad y esperanza en nosotros, a través de la comunión intima con Él. Es mas que saber algo, es tener una seguridad interior que te produce gozo, satisfacción, paz a pesar de lo que pueda estar pasando a nuestro alrededor.

Pablo decía: “porque antes erais tinieblas, pero ahora sois luz en el Señor; andad como hijos de la luz porque el fruto del Espíritu es en toda bondad, justicia y verdad, comprobando lo que es agradable al Señor. Efesios 5:8

En otras palabras. Al ser luces en este mundo, nuestro caminar debe reflejar la luz de Dios a través de ese fruto del Espíritu.

Y Pedro predicaba: “más vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido para posesión de Dios , a fin de que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable; 1 Pedro 2:9

En otras palabras, porque Dios nos sacó de las tinieblas del mundo y nos trasladó a su luz admirable, nosotros debemos anunciarles a otros esta buena noticia.

Conclusión: Al igual que el salmista, los apóstoles se daban cuenta que el creyente no puede vivir bajo la circunstancia que le rodea, lleno de tristeza, angustia y lamentándose por lo que esta pasando, sino que debe agarrarse de Dios y llenarse del recurso que Dios nos ofrece. La Fe y la esperanza.

Descubrir que hay gozo de su presencia. Y que nosotros somos ahora la luz en este mundo, para brillar en medio de la oscuridad del pecado, de la violencia y de la maldad que nos rodea.

Que no tenemos que entristecernos como los que no tienen esperanza, sino levantar nuestras cabezas, sabiendo que cada día que pasa nuestra redención está más cerca.

Que hoy podemos estar pasando tribulaciones, pero en cualquier momento Jesús viene y arrebata su iglesia y en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, saldremos de este mundo y nos encontraremos con el Señor.

Así que hermanos, en vez de vivir tristes, pregúntese a sí mismo: ¿Por qué te abates, oh alma mía? Espera en Dios porque todavía hay motivos porque alabarle.

Él está contigo, él te fortalece, él no te dejará ni te desamparará.

El te da las fuerzas cuando te parece que no tienes ninguna.

Y si te elevas en oración, puedes entrar en el altar de su presencia y sentarte en lugares celestiales con Cristo Jesús, hoy mismo, desde ahí mismo, en tu casa.

En la privacidad de tu cuarto, en el lugar secreto, entre tú y Dios.

Dios enviará su luz y su verdad; estas te guiarán;

Y te conducirán a su santo monte, Y a sus moradas.

Y tú entrarás al altar de Dios, Y encontrarás al Dios que te da alegría y gozo;

Y es ahí que tus labios se llenarán de alabanzas para Dios.

Oremos