“He aquí yo estoy a la puerta y llamo. Si alguno oyere mi voz y abriere la puerta, entraré a al, cenaré con él y el conmigo” Apocalipsis 3:20 No se trata de oír solamente, hay que abrir la puerta para que Cristo entre.
Se trata de la puerta de tu corazón: Hebreos 3:7-8 “Si oyereis hoy su voz, No endurezcáis vuestros corazones”
Introduccion ¿Qué quiere decir endurecer el corazón? No creer.
Jesús quiere entrar a tu corazón, y compartir contigo
Jesús quiere morada permanente: “El que me ama, mi palabra guardara, y mi Padre le amará, y vendremos a El y haremos en él morada” Juan 14:23
Nuestra obediencia a la palabra de Dios, es lo que Dios está buscando, para hacer una morada permanente en nuestro corazón. “de manera que Cristo more por la fe en vuestros corazones; y que arraigados y cimentados en amor” Efesios 3:17
Este verso no fue escrito para el inconverso, sino para la iglesia. Una iglesia que cantaba, oraba y predicaba, pero habían dejado a Cristo afuera.
1. ¿Cómo? ¿Una iglesia sin Cristo?
Quizás cantaban para lucir sus talentos,
quizás oraban para conseguir cosas de Dios
quizás predicaban la prosperidad financiera mas que todo.
Pero nuestro egoísmo y nuestra indiferencia, hieren el corazón de Dios.
Y El se va sin decir nada.
Sansón no sabía que ya Dios no estaba con él. Pero desde que pecó, Dios lo había dejado. No estaba a gusto en ese corazón.
2. Nosotros podemos entristecer el corazón de Dios:
Jesús lloró sobre la ciudad de Jerusalén.
33 años, vivió en esa tierra, captó el amor que los judíos le tenían a la gran ciudad del rey David.
Por tres años, caminó por cada ciudad, por los campos, por las orillas del mar de Galilea, por las plazas, por las sinagogas de ellos y por el hermoso templo
Pero los suyos no le recibieron, no aceptaban su mensaje,
No creían sus palabras, lo criticaban, lo odiaban,
Pidieron que lo mataran.
Si, Jesús lloró sobre la ciudad de Jerusalén, y dijo: “Oh! Si a lo menos en este día conocieras lo que es para tu paz” “Cuantas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina junta a sus polluelos, y no quisiste”
3. Nuestro rechazo entristece el corazón de Dios.
No dejemos que eso nos pase a nosotros.
Porque el que no abre las puertas de su corazón a Dios, Dios seguirá de largo. Y perderás la oportunidad.
Haz lo que tengas que hacer.
Arregla lo que tengas que arreglar,
Pero déjalo entrar.
4. Hay algo que mantiene la puerta cerrada.
El salmista dijo: “Alzad, oh puertas, vuestras cabezas, alzaos vosotras, puertas eternas, para que entre el Rey de la gloria”. Salmo 24:7
Levanta lo que mantiene la puerta cerrada,
sí es un seguro, un pestillo,
si es una tranca, una cerradura,
Quita todo lo que impide que la puerta se abra,
porque el Rey de la gloria quiere entrar.
5. El es el rey de la gloria. Él es Digno de honra y honor. Salmo 72:19 “Bendito su nombre, glorioso para siempre y sea la tierra llena de su gloria” Isaías 6:3“Toda la tierra está llena de su gloria” Su fama se extiende por toda la tierra. Y te está dando el privilegio de entrar a tu corazón.
Él es Rey Justo. Salmo 89:14 “Justicia y juicio son el cimiento de su trono”
Sal. 11:5-7 “Porque Jehová es justo y ama la justicia” “Justo eres tú, oh Jehová en todos tus caminos” Salmo 145:17
6. Los reyes de la tierra no siempre son justos. Tienen intereses personales, abusan de la gente para su propio beneficio.
Rey de paz. Trae la paz y Que busca la paz. en Isaias 9:6,7, se le dio a Jesus el titulo de “príncipe de paz” Y por eso Jesús dijo: Jn 14:27,” La paz os dejo, mi paz os doy… Y tu estas lleno de inquietudes, de temores, cuando el Rey de paz quiere entrar a tu corazón.
Pablo dijo:” 1 Cor 14:33 “Dios no es Dios de confusión, sino de paz”.
7. Rey poderoso. Nadie se compara al poder de nuestro Rey. Es invencible. “Oh Jehová, Dios de los ejércitos, ¿quién como tú? Poderoso eres y tu fidelidad te rodea” Salmo 89:8 Salmo118:16, “La diestra de Jehová hace proezas”,
Y tú lleno de necesidades que no puedes suplir,
lleno de problemas que no puedes resolver,
lleno de preocupaciones que no te dejan ni dormir,
¿cuándo el Rey todopoderoso quiere entrar a tu vida?
8. Él es Rey Santo – absolutamente perfecto. La santidad de Dios es absoluta. No hay ningún área de su vida que este contaminada con maldad, perversidad, engaño, malos sentimientos o ninguna otra cosa semejante.
Salmo 99:9 “Exaltad a Jehová nuestro Dios y postraos ante su monte santo; porque Jehová nuestro Dios es santo” Salmo 89:15 “porque Jehová es nuestro escudo y nuestro Rey es el Santo de Israel”
La santidad de Dios es tan sublime que es la característica que los serafines más admiran, por lo cual dicen en completa adoración: “Santo, santo, santo Jehová de los ejércitos” Isaías. 6:3
9. Él es Rey eminente - Alto, elevado, que sobresale por encima de los demás. “Porque Jehová el Altísimo es temible, gran Rey sobre toda la tierra” Salmo 147:5 “Grande es el Señor nuestro, de mucho poder y su entendimiento es infinito”.
Él es Rey grande. Altísimo sobre todos los reyes de la tierra. “Porque Jehová es Dios grande y Rey grande sobre todos los dioses de la tierra” Salmo 95:3
10. Y, por último: Él es Rey eterno – Sin principio ni fin. Los reyes de este mundo son temporeros; duran por tiempo limitado. Pero Dios reina por la eternidad.
Salmo 10:16 “Jehová es rey eternamente y para siempre”.
Salmo 148:10 “Y su reino no tendrá fin”
Dan. 4:2 “conviene que yo declare las señales y milagros que el Dios Altísimo ha hecho conmigo. ¡Cuán Grandes son sus señales, y cuan potentes sus maravillas! Su reino, reino sempiterno y su señorío de generación en generación”,
Daniel 7:14 “Su dominio es dominio eterno que nunca pasará y su reino uno que no será destruido”
Palabras proféticas acerca de Cristo en Lucas 1:33 “Y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin”
Conclusion: Cuando Cristo entra a tu casa, tú eres beneficiado:
Cuando Cristo entró en la casa de Zaqueo, entró la salvación allí. “Zaqueo, desciende que es necesario que hoy pose en tu casa” “Hoy ha venido la salvación a esta casa”
Jesús entró en la casa de Pedro y llegó sanidad divina para su suegra.
Jesús entró a la casa de Cana de Galilea, y hizo un milagro de provisión.
Nos conviene que Jesús entre en nuestra casa y en nuestro corazón.
Jesús es el Rey de Reyes, déjalo entrar en calidad de Rey de tu vida.
Dale el trono de tu corazón,
Dale el gobierno de tu vida y ponte a sus ordenes para hacer su voluntad
Abre las puertas de tu corazón, sin miedo ninguno, porque el es Rey de paz, Rey de amor y misericordia.
No pierdes nada, pero ganas mucho cuando Él entra en tu vida.
Déjalo entrar en tu corazón, y el derramará su amor dentro de ti.
Déjalo entrar en tu vida y tu vida cambiará en todos los sentidos.
déjalo entrar en tu casa, y verás milagros de provisión en tu hogar,
Pablo dijo: 1 Tim 6:15-16 “Al bienaventurado, y solo soberano Rey de reyes y Señor de señores. Al único que tiene inmortalidad que habita en luz inaccesible, a quien ninguno de los hombres ha visto ni puede ver, al cual sea la gloria y el imperio sempiterno, amen.”
Quizás estás pensando, “Pero ya yo soy cristiano, ya yo entregué mi vida a Cristo”
Pero te voy a decir algo, hay veces que después que llevamos algún tiempo sirviendo al Señor, nos damos cuenta que hay algunas áreas de nuestra vida que no están rendidas a Cristo todavía.
Hay detalles en los que nosotros queremos mandar y hacer como nos parezca.
Hay áreas en nuestra vida en las que todavía el yo esta al mando, y nos sentimos con el derecho de decidir, hacer y decir. Pero Cristo quiere todo tu corazón, toda tu alma y toda tu mente.
Con Cristo no podemos ir a medias. El quiere todo, o nada. Es tu decisión:
Ahí mismo donde estas, entre tú y Dios solamente, haz una entrega completa y deja que Cristo sea Rey de toda tu vida, de toda tu mente, de tu voluntad, de tus ambiciones y deseos, de tus planes y de todo lo que eres, y de todo lo que puedas ser.
Oremos.
