Vamos a Malaquías tres y verso seis. Hoy vamos a tocar el tema en cuanto a la inmutabilidad de Dios. Estamos en la serie conociendo a Dios y a su Hijo Jesucristo. El tema de Dios inmutable, tiene que ver conque Dios no puede cambiar o no puede ser alterado.
Si nos ponemos a observar el mundo en que vivimos, podemos darnos cuenta y observar que día a día, está bajo cambios constantes. Y por esta razón vive con mucho temor por causa de la incertidumbre. Y esto se puede notar en toda la tierra. El temor, miedo y ansiedad es evidente, dado a que el ser humano tiene un fuerte deseo en querer tener control de todo lo que tenga que ver con su vida. Lo único que puede tener seguridad es que no podrá evitar ese día en que ha de morir.
El ser humano sabe que no puede tener control sobre la economía o por lo menos hasta ahora, sobre esta supuesta pandemia. Dado entonces, en que no tiene control, empieza a hacer las preguntas equivocadas, Como por ejemplo: ¿Porqué tuvo que morir? ¿Porqué me dejó por otro (otra)? ¿Porqué me despidieron del trabajo?
Ninguna de estas preguntas pueden resolver los problemas o pueden cambiar la situación.
Y entonces cuando vemos la diferencia entre Dios y la humanidad, necesitamos meditar en la importancia de la inmutabilidad de Dios. Debemos tomar el tiempo en aprender y conocer todos los atributos que posee nuestro Padre Celestial.
Este pensamiento de lo que vamos a aprender en el día de hoy, es importante porque Dios no cambia y el mundo por ahora, cambia cada día. Dios siempre será bueno, será perfecto y justo. Necesitamos como pueblo de Dios el dejar la inmadurez para ir hacia la madurez espiritual. Pensemos en esto, no existe la posibilidad de que Dios sea forzado a cambiar o que lo puedan alterar. Sus mandamientos nunca cambiarán o que la profecía ya dada por los profetas tenga que ser cambiada para conveniencia del ser humano.
En Santiago 1:17, nos dice: "No hay mudanza, ni sombra de variación." Por igual en Hebreos 13:8, el autor dice: "Jesucristo es el mismo ayer y hoy y por los siglos."
El no necesita agregar nada o algo más a los atributos que ya posee. Por eso, como hemos dicho al principio cuando comenzamos esta serie de conocer a Dios, nosotros hemos sido creados y somos parte de la creación, somos por lo tanto finitos y limitados en nuestro conocimiento y comprensión en cuanto a Dios. El hombre debido a que no puede, ni nunca podrá ser igual a Dios, entonces la solución para él, ya que tiene un problema sobre este tema, necesita elevarse por encima de Dios es ser igual a él o el tener que eliminarlo o ignorar su existencia. Lo hace por su incapacidad de no tener control absoluto sobre él o no poder tener conocimiento completo de todo. Lo que nos lleva a la siguiente pregunta: ¿Cómo podemos entender a Dios y su palabra?
Dios no cambia y por ser siempre igual, Dios se comunica con el hombre por medio del lenguaje humano. Por medio de palabras que pueda tener podrá en cuanto a la información que tenga, se dará cuenta de la limitación tan grande que tiene en su conocimiento. Por eso, existe un esfuerzo bien grande en querer desacreditar la Biblia y encontrar fallas y errores en la Biblia.
El problema que necesitan solucionar se basa en este pensamiento en que si Dios no existe, no existe infierno, y no existe el día del juicio final. Y la Biblia es bien clara en cuanto a la manera en como Dios actúa en contra del pecado. Por ejemplo, encontramos en Jonás 3:10 - "Y vio Dios lo que hicieron, que se convirtieron de su mal camino y se arrepintió del mal que había dicho que haría y no lo hizo." O lo que dice en Génesis 6:5 y 6 - "Dios vio la maldad de los hombres era mucha sobre la tierra. Los pensamientos era de continuo solamente el mal. Y se arrepintió Jehová de haber hecho hombre sobre la tierra y le dolió en su corazón."
Tenemos la habilidad entonces de dar y recibir información por medio de la comunicación. El hombre está dotado para razonar y ejercitar la inteligencia. Por lo tanto, el ser humano tiene la capacidad de comprender quién es Dios en la medida en que él se nos ha revelado a nosotros. Cuando dice que se arrepintió, simplemente se está comunicando en términos humanos, limitado de una manera que pueda comprender. La palabra "arrepintió" en el Hebreo es "Nacham", que quiere decir: Afligirse por tener compasión o respirar profundamente. Significa una muestra física de los sentimientos.
Dios como es Santo, no tolera el pecado y estableció entonces que la paga del pago es muerte.
Esto no cambiará nunca. En nosotros los humanos es todo lo contrario. Ya que los cambios son inevitables y son constantes. En nuestro caso, son necesarios y son provechosos. Les voy a explicar un poco lo que quiero decir.
Vamos a Romanos 8:28 - 30. Dios quiere producir en nosotros una fe que sea fuerte y que disfrutemos de todo aquello que Dios nos ha concedido a nosotros sus hijos. Cuanto más le conozcamos en cuanto a este punto que él es inmutable, que no cambia, más le amaremos, porque como vimos la semana pasada, nos ha hecho participantes de la naturaleza divina. Todo lo que sucede en nuestras vidas es para el bien nuestro. Todo obra para bien y seamos conformados a la imagen de Cristo Jesús. En todo esto el diablo y sus ángeles y todos los seguidores que tiene, son instrumentos en las manos de Dios, para ponernos a prueba a todos aquellos que somos sus hijos. Lo dice Pablo a la iglesia de Corinto: "No nos ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana, pero fiel es Dios que no nos dejará ser tentados más de lo que podemos resistir, sino que dará también juntamente con la tentación, la salida para que podamos soportar." (I Corintios 10:13).
Luego en Filipenses 1:6, Pablo le dice a la iglesia: "El que comenzó en nosotros la buena obra, la ira perfeccionando hasta el día de Jesucristo."
El conocimiento produce dominio propio. Y esto quiere decir que el Espíritu Santo, nos ayuda con su poder a controlar nuestros pensamientos, nuestra forma de hablar y actuar. El lleva todas nuestras necesidades. Y esto nos llevará a eliminar el pecado de nuestra vida.
Por ejemplo, ¿Cuántos se han hecho un análisis de sangre? El análisis de sangre se basa separar las partes de un todo y así se puede conocer los elementos que lo configuran. Si encuentra que hay presión alta o tenemos el azúcar elevada o el colesterol lo tenemos alto. ¿Qué nos dice el doctor que debemos de hacer? Nos dirá que debemos de eliminar todo aquello que nos hace mal. Y a muchos, el mundo que rechaza a Dios, no les gusta escuchar esto de que Dios nos ha librado de la esclavitud del pecado. No les gusta escuchar incluso a gente que asiste a una iglesia de que estamos mal. Por eso saltan de una iglesia a otra y buscan escuchar al predicador que predique de acuerdo a lo que esté de acuerdo a su estilo de vida. En un mundo caído como este, el que nosotros podamos cambiar o ser transformados para reflejar la naturaleza divina, es un don de Dios que un valor indescriptible, que merece que nuestras almas sean una fuente de alabanza por todo lo que Dios hace en cada uno de nosotros. El dominio propio producirá fuerza, poder, control, donde no nos dejáremos dominar más por el pecado o por lo menos, resistirlo más. Es la esencia de cuan arrepentidos estamos y mostramos los frutos de que así es. El mentiroso, no querrá mentir más. El que odia ahora podrá amar a su prójimo. El que desobedecía los mandamientos, ahora querrá obedecerle. El que robaba no querrá hurtar más.
Todo fue alterado, modificado o cambiado por el poder de Dios que ahora está a la disposición de cada creyente. Nuestros pensamientos, deseos y voluntad ahora estará bajo el dominio de Dios por medio de su Espíritu Santo. Podemos con confianza decir de "el viejo hombre, ya no existe más. Hemos sido revestidos del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno." (Colosenses 3:10). Esto es lo significa estar bajo el Nuevo Testamento o Nuevo Pacto. Porque hubo un sacrificio que fue perfecto.
¿De qué me sirve conocer a Dios? ¿Qué significa para mí la eternidad con Dios o que él es auto suficiente o de que él es inmutable? Creados para su gloria, con un deseo de querer tener un conocimiento profundo de Dios. El que nunca cambie, trae paz a nuestras vidas. Lo que él sintió antes de que todo fuese creado, es lo que siente hoy mismo y lo sentirá por siempre. Su amor nunca deja de ser.
¿Te sientes cansado, frustrado, desilusionado o derrotado? El Señor te dice: "Vengan a mi todos los que se sientan así, y Yo los haré descansar." La invitación sigue vigente, no ha cambiado. ¿Tienes sed y hambre? El Señor Jesús le dice al alma fatigada y cansada: "Si alguno tiene sed, venga a mí y beba. Yo Soy el pan de vida, el que a mí viene, nunca tendrá hambre."
Todo depende de nosotros en querer cambiar y dejar que él gobierne completamente en nuestras vidas. Debemos someternos a su voluntad completamente. Dejar que su poder fluya en nuestra vida. El mundo y su poder va a dejar de ser uno de estos días. Todo esto que hemos estado aprendiendo en estas semanas debemos de prestar atención a lo que tenemos que hacer como hijos de Dios.
Vamos a Mateo 6:8 y 10. El Señor nos dice que aprender un detalle en cuanto a Dios Padre: El sabe de todas aquellas en las cuales tenemos necesidad. Por eso, pedimos que se haga su voluntad en el cielo como lo es en la tierra. Si nuestra voluntad está alineada con la suya, solo en ese momento, encontraremos el verdadero significado de la vida. El mismo Jesús dijo: "No se haga mi voluntad, sino la tuya." ¿Sabes cuál es la voluntad de Dios para tú vida?
Si buscamos hacer nuestra voluntad, esto traerá mayor estrés a nuestras vidas. Recuerda, él sabe nuestra necesidad y sabe todo antes que se lo pidamos. Por lo tanto, busquemos hacer su voluntad. Jesús se confrontó con la prueba más dura y la más difícil, al someter su voluntad con la del Padre. ¿Estás listo? ¿Estás lista para hacer lo mismo? Dios sea contigo a medida que crecemos en el conocimiento del Todopoderoso.