20A - La mujer Cananea
Podríamos tal vez pensar que la Cananea era una madre soltera o sola, con una hija que desesperadamente necesitaba la ayuda de Jesús.
La reacción de Jesús al pedido de esta agobiada madre es muy interesante. En verdad, El no ofreció respuesta; sus discípulos ciertamente no querían ’ tener nada que ver con ella….es como que dijeran, “no; no me cae mal..me molesta que respire, sólo eso.”
En seguida, como si las cosas no pudieran tomar un inesperado giro, Jesús se vuelve a la mujer y le dice que El ha sido enviado para servir a la comunidad Judía: “"Yo no he sido enviado sino a las ovejas descarriadas de la casa de Israel.”
Para empeorar las cosas, Jesús repite el ‘dicho del día’, …que los paganos no eran sino ‘perros’, aunque el término usado por El es el de “perrito” como para suavizar sus palabras.
Posteriormente vemos en el versículo 28 que Jesús la celebra al decirle: “¡qué grande es tu fe.”
La palabra griega es …’great’ “mega”. “Mega-Fe.”
1. La cananea tuvo que vencer barreras:
Barreras interiores: el pecado, el egoísmo, el orgullo.
e.g.Ella representaba el género, religión y nacionalidad equivocadas, pero a pesar de esto, ella habló convencida de que creía que Jesús curaría a su hija. Con frecuencia, las voces que te dicen que estás ‘equivocado’ surgen de nuestro interior. ¿Cuál es aquí la lección? Para obtener sanación, no debes aceptar “NO” como respuesta.
e.g. He aquí un testimonio de Janice B., de Nevada-
“Al asistir a mi primera conferencia, me di cuenta de que todas las ‘voces antiguas’ me perseguían: —“No eres ni suficientemente buena ni suficiente inteligente; ¿Qué te hace pensar entonces que tienes algo importante que decir?” Pero, Al-Anon me ha enseñado a no retirarme ante el milagro!
Al revisar mi ‘bolsa de herramientas’ de Al-Anon y “apoyarme en el momento”, esas voces se disiparon y fuí capaz de abrir mi corazón y dejar que el amor del programa entrara en el.
Darse cuenta del potencial espiritual que tenemos sólo sucede cuando nos salimos del ambiente confortable que nos rodea y empezamos a confiar. Si confío que Dios da prioridad a mis intereses, desatiendo esas voces inútiles que me alejan de ese potencial espiritual y dejo que se esfumen. Puedo entonces permitir que nuevas voces me guíen hacia adelante para poder continuar buscando ese potencial.
2. Una segunda lección es no tomar las cosas en forma personal. Nosotros somos actores secundarios en los dramas de otros. Para probarla, Jesús la llama ‘perrito’, pero a la cananea esto no la desarma en absoluto. Y contesta entonces: "Es cierto, Señor; pero también los perritos se comen las migajas que caen de la mesa de sus amos.”
Y hablando de perritos, vi una foto de un perro y un gato mirando por la ventana; esperando al lado de la puerta. Debajo de la foto se lee que el perro dice: “El amo llegó, Yay!” El gato dice: “Estás tarde, esclavo.”
Efectivamente, la mujer fue muy viva en usar esa expresión de ‘perrito’ como un instrumento: “Toma lo que te gusta y deja el resto”, O, como se dice en el campo, “Come la paja y escupe los palillos.”
La Caridad no tiene requisitos rígidos; no exige que otros se adapten a ella, pero está lista, no obstante, a acomodarse al prójimo.
Dios se adaptó a nosotros cuando se hizo hombre; sin embargo, nosotros no sabemos como bajarnos del pequeño pedestal de nuestras personalidades para adaptranos a las mentalidades, preferencias y necesidades de nuestros hermanos.
3). Finalmente, la mujer levantó su cabeza, como para demostrar aún más su gran fe en el poder de Jesús--
En este sentido, conozco personas que se arriesgan a ser arrestadas para proteger a los niños que no han nacido aún.
Otro ejemplo de tenacidad son los matrimonios que sobreviven las tormentas de la vida -- Como enseñaba San Juan de la Cruz, «los viejos amadores son los ya ejercitados y probados».
Ellos «ya no tienen aquellos hervores sensitivos ni aquellas furias y fuegos hervorosos por fuera, sino que gustan de la suavidad del vino de amor ya bien cocido en su sustancia [...] asentado allá dentro en el alma».
Esto supone haber sido capaces de superar juntos las crisis y los tiempos de angustia, sin escapar de los desafíos ni esconder las dificultades.
