EL SIGNIFICADO DE LA CRUZ
1a. Co. 1:18
Porque la predicación de la cruz es locura a los que se pierden; pero a nosotros los salvos, es poder de Dios.
Gá. 6:14
Mas lejos esté de mí gloriarme, salvo en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por el cual el mundo me es crucificado a mí, y yo al mundo.
I. El Plan Original de Dios
Todo el mundo entendía que el sacrificio mas aceptable para los pecados era un cordero.
También entendía del principio de un Mesías.
Juan 1:29
El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo.
Ap. 13:8
Y le adorarán todos los moradores de la tierra cuyos nombres no están escritos en el libro de la vida del Cordero, el cual fue inmolado desde la fundación del mundo.
--Por la palabras "fundación del mundo", sabemos que Dios el Padre, Dios el Hijo, y el Espíritu Santo aprobaron este plan aún antes de la creación de la tierra.
II. Simbolísmo del Antiguo Testamento
Nú. 21:8,9
8 Y Jehová dijo a Moisés: Hazte una serpiente ardiente, y ponla sobre un asta; y será que cualquiera que fuere mordido y mirare a ella, vivirá.
9 Y Moisés hizo una serpiente de bronce, y la puso sobre un asta, y sucedía que cuando alguna serpiente mordía a alguno, miraba a la serpiente de bronce, y vivía.
En su jornada, el pueblo de Israel quejaba y murmuraba. Dios les mandó serpientes ardientes. El serpiente siempre representa la fuente de pecado.
El pueblo reconoce su rebelión y pecado, y piden que sea quitado el castigo.
Dios le dio a Moisés la receta. Una serpiente de bronce sobre un asta (palo).
Hasta hoy en día, los médico usa este símbolo.
Juan 3:14,15
Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado;
para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
--Cristo tomó la carga de todo el pecado del mundo sobre El en la cruz. La promesa fue de vivir y no morir, aquel que fijó su vista en la serpiente de bronce levantada.
III. La Barbaridad de la Cruz
La verguenza más fea para una persona era de ser ejecutado, siendo colgado en una cruz.
Gá. 3:13
Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque escrito está: Maldito todo aquel que es colgado en un madero)
Dt. 21:23
no dejarás su cuerpo toda la noche en el madero, mas sin falta lo enterrarás el mismo día, porque maldito por Dios es el colgado; y no contaminarás tu tierra, que Jehová tu Dios te da por heredad.
En el tiempo del Nuevo Testamento, el símbolo de la cruz significaba un instrumento de ejecutación. Sería equivalente a una silla eléctrica hoy en día. Absolutamente nadie pensaría de colgar una cruz de fierro en su persona.
La cruz fue reservada por los peores crímines.
Heb. 12:2
puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual, por el gozo puesto delante de Él sufrió la cruz, menospreciando la vergüenza, y se sentó a la diestra del trono de Dios.
---Le dio gozo a Cristo de ser el sacrificio perfecto por la humanidad.
---Por tantos años los sacrificios provistos por los sacerdotes solamente fueron provisionales.
---sufrió = la crucificación fue una muerte lenta y de mucho dolor
---verguenza = se identificó con los peores de los criminales, y fue completamente desnudo.
Fil. 2:8
y hallado en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.
IV. El Mensaje Céntrico del Cristianismo
1a. Co. 1:23
pero nosotros predicamos a Cristo crucificado, para los judíos ciertamente tropezadero, y para los griegos locura;
A. Los judíos buscaba un Mesías para restaurar su reino; no una persona rendida a morir en una cruz.
B. Los griegos solamente vieron un hombre loco.
Col. 1:20
y por medio de Él reconciliar todas las cosas consigo; así las que están en la tierra como las que están en el cielo, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz.
V. Ahora Nuestra Cruz
No es de madera, pero es negarse a si mismo para imitar el ejemplo de nuestro Salvador y para identificar con El de victoria a victoria.
Lc. 9:23
Y decía a todos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz cada día, y sígame.
Nuestro deber es de predicar la cruz de Cristo y de llevar nuestra cruz personal.
