Presente Con El Señor

1 Sabemos que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshace, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha por manos, eterna, en los cielos. 2 Y por esto también gemimos, deseando ser revestidos de aquella nuestra habitación celestial,

3 pues así seremos hallados vestidos y no desnudos.

4 Asimismo los que estamos en este tabernáculo gemimos con angustia, pues no quisiéramos ser desnudados, sino revestidos, para que lo mortal sea absorbido por la vida.

5 Pero el que nos hizo para esto mismo es Dios, quien nos ha dado el Espíritu como garantía. 6 Así que vivimos confiados siempre, y sabiendo que entre tanto que estamos en el cuerpo, estamos ausentes del Señor

7 (porque por fe andamos, no por vista). 8 Pero estamos confiados, y más aún queremos estar ausentes del cuerpo y presentes al Señor.

9 Por tanto, procuramos también, o ausentes o presentes, serle agradables. (oremos)

1. La verdad más importante que podemos conocer acerca del cielo es esta-

Hermanos y amigos, la única manera que un hombre, que una mujer, o que un joven pueda llegar al cielo es por la gracia de Dios y nunca a través de algo que el o ella ha hecho.

La Biblia deja lo siguiente muy claro- ¡el cielo no se puede ganar o comprar, sólo se puede recibir como el regalo de Dios para nosotros- ¡un regalo hecho posible por lo que Jesucristo hizo en la cruz del calvario.

2. Hemos comenzado una serie de mensajes titulado “el cielo- nuestro hogar eterno”

Hemos aprendido lo que el cielo es: el cielo es la gloriosa morada de Dios y el hogar eterno de aquellos que le pertenecen a Él.

Hemos aprendido lo que el cielo no es: el cielo no es un lugar adonde el apóstol Pedro guarda la entrada o adonde hay niños gorditos volando en el aire tocado el arpa.

Y finalmente aprendimos lo que el cielo contiene: nuestro Padre Dios esta en el cielo, nuestro Salvador Jesucristo esta en el cielo, nuestros nombres y nuestra herencia están en el cielo.

Todas estas cosas maravillosas están en el cielo en este mismo

momento.

3. Hoy estaremos examinando otro pasaje que es vital para nuestro entendimiento del cielo y de la vida después de la muerte.

Y la sección que estaremos mirando habla específicamente de la condición de los creyentes en cielo antes de la resurrección final. Pablo dice que el estar ausente del cuerpo es el estar presente con el Señor.

4. Pero antes que examinemos 2 Corintios Capitulo 5- Nos debemos hacer una pregunta-- ¿Por qué un estudio acerca del cielo? ¿Por qué es tan importante mantener nuestra mirada sobre las cosas de arriba?

Bueno el apóstol Pablo nos dice en 2 Corintios 4:16-18—

“16 Por tanto, no desmayamos; antes, aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día, 17 pues esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria; 18 no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven, pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.”

5. ¿Ven la frase “no desmayamos” en el versículo 16? Esta frase literalmente significa “no perdemos el corazón”.

¡En otras palabras Pablo nos dice que debemos de mantener nuestra mirada en el cielo por la vida que vivimos aquí sobre la tierra! En otras palabras señoras y señores--

¡Este mundo puede ser muy cruel!

¡La gente en este mundo pueden ser bien malos con uno!

¡Día tras día el cristiano verdadero sufre persecución, sufre burla, sufre rechazo por la causa del Señor Jesús- y vamos ser honestos en este día- ¡es fácil desanimarse!

Yo lo que Pablo dice al decir “no desmayos” es esto. Que esta vida es bien duro, que el ministerio es duro, pero no nos damos por vencido porque un día estaré con nuestros Señor y Salvador Jesucristo.

Esta vida y sus dificultades es nada comparado al día que estemos con el mismo Dios en el cielo.

Pudiéramos decir que la realidad del cielo mantenía a Pablo lleno de gozo y animo. De la misma manera, la realidad del cielo debe de llenar a nosotros también de esta esperanza que sentía el Apóstol Pablo.

6. OK, les invito en este día que miren conmigo unas verdades tremendas acerca del cielo en 2 de Corintios Capitulo 5

Primeramente, el apóstol Pablo nos enseña que-

1. LA DEBILIDAD DE NUESTROS CUERPOS NOS RECUERDA DEL CIELO (VV. 1-4)

1 Sabemos que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshace, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha por manos, eterna, en los cielos. 2 Y por esto también gemimos, deseando ser revestidos de aquella nuestra habitación celestial,