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La Verdad Bajo Fuego Series
Contributed by Frank Lay on Jan 24, 2007 (message contributor)
Summary: Aunque la carta de Juan 2 es muy corta, tiene un mensaje muy significativo para nuestro tiempo, especialmente respecto a nuestra relación con la verdad que hay en Jesucristo. En esta carta Juan nos enseña tres cosas acerca de la verdad.
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LA VERDAD BAJO FUEGO
2 JUAN
Jesucristo es la verdad encarnada en cuerpo humano. Pero la verdad esta bajo fuego hoy en día. Una forma en la que la verdad este bajo fuego es el retorno de una antigua herejía conocida con el nombre gnosticismo. Esta herejía tuvo su origen en el primer siglo d. de J. C., y casi destruye a la iglesia cristiana durante el segundo y tercer siglos d. de J. C. Durante la última parte del siglo 20, el gnosticismo regresó, y se ha hecho popular. Se puede encontrar libros gnósticos en cualquier librería secular de la actualidad. Además, el libro y la película de “EL Código Da Vencí” están basados en las enseñanzas del gnosticismo. Los escritos de los gnósticos fueron rechazados por la iglesia primitiva, pero el movimiento ha cobrado mucha influencia hoy por hoy.
Las cartas de 1 y 2 Juan se ocupan de la misma herejía. Hay dos temas principales en 2 Juan. Primero, Juan insta a sus lectores a practicar el amor cristiano (2 Juan 5). Es más, llama a los hermanos a que afirmen la doctrina correcta en cuanto a Jesucristo (2 Juan 7-11). Esto se debe a que algunos gnósticos negaban la deidad de Jesucristo. Según ellos, Jesús era un simple hombre. Ellos creían que el Cristo divino sobrevino al Jesús humano en el momento de su bautismo pero lo dejó después de su muerte en la cruz. Otros gnósticos enseñaban que Jesús era una aparición fantasmagórica. Ellos negaban la humanidad de Cristo. Este era el problema más serio visto en las cartas de Juan. Las dos ideas de los gnósticos rechazaban la doctrina de la encarnación
Aunque la carta de Juan 2 es muy corta, tiene un mensaje muy significativo para nuestro tiempo, especialmente respecto a nuestra relación con la verdad que hay en Jesucristo. En esta carta Juan nos enseña tres cosas acerca de la verdad.
LOS CREYENTES POSEEN LA VERDAD (1-3): En el versículo 1 Juan identifica a si mismo como el anciano. La palabra anciano probablemente se refiera a la edad avanzada del apóstol Juan tanto como su autoridad como apóstol del Señor.
Juan envía la segunda epístola a una sola persona o, tal vez, a una iglesia especifica. Juan envía esta carta a la señora elegida y a sus hijos. Algunos estudiosos creen que la frase la señora elegida y a sus hijos se refiere a una mujer cristiana y sus hijos. Otros creen que esta frase es simbólica para aludir a una iglesia específica, y sus hijos son sus miembros. Juan dirige la carta a la señora elegida y a sus hijos, a quienes yo amó en la verdad; y no solo yo, sino también todos los que han conocido la verdad. Un examen de los versículos 1-3 revela tres cosas importantes en torno a la verdad.
1. La verdad es una persona: Una palabra clave en 2 Juan es la palabra verdad. Juan la usa cinco veces en los cuatro primeros versículos. Algunas veces Juan usa el artículo definido ante la palabra la verdad. Esto hace que la verdad se refiere a una persona. En Juan 14:6, Jesús dice: Yo soy la verdad. Entonces Jesucristo es la manifestación de la verdad. Dios se hizo hombre en Jesucristo. Los verdaderos creyentes poseen la verdad por medio de su encuentro con Jesucristo.
2. La verdad es interna: El versículo 2 dice, a causa de la verdad que permanece en nosotros. Cuando el pecador se arrepiente de su pecado y recibe a Jesucristo como Señor y Salvador, la verdad habita en su vida.
3. La verdad es eterna: Nótese la última parte del versículo 2. Y estará para siempre con nosotros. La epístola a los Hebreos declara, Jesucristo es el mismo ayer, hoy, y por los siglos (Hebreos 13:8). Los teólogos usan la palabra “inmutable” para enseñar que Jesucristo nunca cambia. Jesucristo era la verdad en el pasado, es la verdad en el presente, y será la verdad para siempre.
LOS CREYENTES PRACTICAN LA VERDAD (4-6): Las personas que reciben a Jesucristo por fe ya poseen la verdad. Pero, no tan sólo poseen la verdad, sino que también practican la verdad diariamente. El conocimiento de la verdad determina cómo los cristianos han de llevar su vida cotidiana. Dos mandamientos reflejan cómo los verdaderos creyentes llevan su vida.
1. Los verdaderos creyentes andan en la verdad: Mucho me regocijé porque he hallado a algunos de sus hijos andando en la verdad, conforme al mandamiento que recibimos del Padre (2 Juan 4). Si la verdad permanece en nosotros para siempre, es nuestra responsabilidad andar en la verdad diariamente. Como pastor por más de cuarenta años, he tenido el privilegio de visitar algunas iglesias donde fui pastor en el pasado. Una vez encontré a una mujer que había aceptado al Señor cuando era muy jovencita. Fue un gozo para mí saber que, después de veintiocho años, aun andaba ella con el Señor. Sin embargo, en otras ocasiones, al preguntar por algunos individuos, supe que habían dejado la iglesia, y ya no andaban con el Señor.