Jesús: El Mejor Regalo En Navidad. Isaías 9:6

NTV Pues nos ha nacido un niño, un hijo se nos ha dado; el gobierno descansará sobre sus hombros, y será llamado: Consejero Maravilloso, Dios Poderoso, Padre Eterno, Príncipe de Paz.

RVR1960 Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz.

Introduccion:

Una semana bien ocupada: trabajo, Dow Jones en alza, grandes ventas Black Friday, Cyber Week. Muchas personas aprovechan “los especiales” para regalar: primero así mismo (me lo merezco, he trabajado mucho, lo necesito) y también para regalar a otros (seres queridos, intercambios de regalos, Charities etc.).

Pero sabes por qué regalamos en Navidad? Leer Isaias 9:6.

Porque, aun sin saberlo, estamos imitando y celebrando al Dios Todopoderoso que regalo a Jesús, su Hijo, en la primera Navidad, cuando este pequeño niño nació en Belén de Judá.

Ante todo, note el tipo de regalo: Dios no nos regaló un objeto, una religión, un rito. Dios nos regaló una persona, se nos regaló El mismo en la persona de su hijo Jesucristo para que establezcamos una relación con El, no una religión.

I- ¿Por qué Dios nos regaló a Jesús?

- Dios no estaba obligado a enviar a su Hijo, de hecho si fuera obligación, no fuera regalo. Dios lo hizo porque nos ama y quiere para nosotros lo mejor.

- Dios envió a su Hijo gratuitamente, por gracia, aunque fue un regalo costoso; Jesús tuvo que morir en la cruz.

- Dios nos hizo el regalo más útil: por medio de Jesús tenemos salvación (perdón de nuestros pecados) y vida eterna. Juan 3:16.

II- Si, Jesús es el regalo perfecto dado por Dios ¿qué vas a hacer con ese regalo?

Ilustración: Un pariente pobre lleva un humilde regalo a sus familiares ricos. Después de marcharse, regresa minutos más tarde a buscar algo que se le quedo, con sorpresa, encuentra su regalo, sin abrir, tirado a la basura. ¿Quien actuó mal? ¿El que llevo el regalo humilde pero con amor, o el que lo despreció?

Un regalo dado con amor no se tira al lado ni se deja en la caja.

Un regalo gratis pero costoso es desenvuelto, sacado de la caja y usado.

Los mejores regalos tienen un propósito y se utilizan durante mucho, mucho tiempo.

En Isaías 9.6-7, Dios nos dice "Te voy a enviar un regalo que necesitas. . . uno que usarás por siempre".

Cuando Dios prometió que " nos ha nacido un niño, un hijo se nos ha dado ", esta no era una idea de regalo de último minuto.

Él sabe exactamente lo que necesitamos aun antes de nacer, él conocía el regalo perfecto para enviarte a ti y a mí.

Sabía que necesitábamos un Consejero Maravilloso, Dios Poderoso, Padre Eterno, Príncipe de Paz.

III- Un regalo dado por amor, debe aceptarse con gratitud y alegría.

No hay obligación para aceptar un regalo, pero si este se hace con amor, ¿que tu harías? ¿Cómo te sentirías tu si te rechazan un regalo costoso dado con amor? (un anillo de compromiso por ejemplo).

Tristemente, gran parte del mundo no ha recibido el regalo costoso que Dios envió para que ellos lo tengan.

Ese regalo, Jesús, no llegó en una caja bellamente decorada con papel de regalo brillante y con un gran lazo.

No fue entregado por Amazon, ni llegó a un palacio, ni funcionarios del gobierno lo aprobaron.

En cambio, este regalo vino como "un bebé envuelto en pañales y acostado en un pesebre". Lucas 2.12 NASB

Vino como un bebé común, como nacen todos los bebés desde el principio de los tiempos. Un regalo que trajo paz “para todo hombre de buena voluntad”

Hay personas que rechazan este poderoso regalo de Dios... El problema no está en el regalo de Dios... el problema es que muchas personas se distraen con cosas de este mundo que parecen más grandes, más atractivas, más seductoras para ellos.

IV- ¿Cómo aceptar ese regalo de Dios?

Confiesa tus pecados a Él, arrepentido, pídele perdón y cree en El.

Termino con unas palabras que el pastor Víctor puso en el boletín de hoy:

“Parece que Cristo continúa relegado al pesebre de Belén, lejos de nuestros ojos, de nuestra casa, de nuestras vidas. Pero no debía ser así. Él es lo único más importante de la Navidad, el motivo real de nuestra alegría.

La Navidad debe ser conmemorada con Jesús en el pesebre de nuestros corazones, en los colores de nuestra dicha, en la abundancia de nuestra adoración y obediencia. La fiesta es Jesús, la alegría es Jesús, las alabanzas son para Jesús, los abrazos son dados por causa de Jesús.

¿Qué significa tener una Feliz Navidad? ¿Ganar muchos regalos? ¿Comprar ropas nuevas? ¿Reformar la casa? Todo eso es apenas consecuencia de una Feliz Navidad. Una Feliz Navidad existe cuando Jesús es el Señor y Salvador de nuestras vidas, el iluminador de nuestros hogares, la guía segura de todas nuestras decisiones. ¡Eso es tener una Feliz Navidad!”

Llamamiento y oración.

Rev. Luis Márquez

Ministro Ed. Cristiana

Iglesia de La Trinidad

Miami, Florida, USA

www.iglesiadelatrinidad.com