Esperanza Madura Series

ROMANOS 5:1-5

ESPERANZA MADURA

(Filipenses 1:3-11)

Por favor, llevántense para la lectura de la Sagrada Escritura y busquen el libro de Romanos, Capítulo cinco, versículo del 1 al 5. Leamos - Oremos.

El Cristiano sabe que cuando aceptó a Jesucristo como Señor y Salvador occurió un cambio maravilloso y grande en su vida. El sabe también que el Dios “que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Cristo Jesús” (Filipenses 1:6). Pero ¿Cuál es la buena obra que Dios está haciendo en su vida? ¿Qué es el trabajo del Espíritu Santo en su vida? Y también ¿Qué produce el trabajo de Dios en su vida?

Dios quiere derramar Su amor en nuestro corazón, pero nuestro corazón no está listo para recibir más de Dios, porque esta lleno de las cosas del mundo y las cosas de nuestra naturaleza pecaminosa. Para recibir más y más del amor de Dios necesitamos más y más del trabajo de Dios en nuestras vidas para preparanos para más y más del amor de Dios. La buena obra de Dios en nuestra vida nos prepara para recibir más del amor de Dios (I.C.T.) Cuando intendemos más de que Dios está haciendo en nuestras vidas, podremos glorifcarnos en el trabajo de Dios.

Las tres lineas generales del mensaje son:

I. El Resultado de la Justificación, 1-2.

II. Los Resultados Nuevos en las Tribulaciones, 3-4.

III. El Resultado de la Esperanza Madura, 5.

I. El Resultado de la Justificación es paz, gracia y espernza. Versículo 1 dice, Justificados, pues por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo;

Paz es un resulto de la justificación, pero, ¿qué es la justificación? Justificación es un término de los abogdos y del sistema legal. Una persona está justificado cuando ha pagado completamente su deuda contrajó por su crimen. El juez tribunal decide por la evidencia que uno es justificado o no. Cristianos también son justificados. La justicia de la ley ha sido satisfecho cuando Jesus murió en nuestro lugar en la cruz. Por la fe en Jesucristo estamos justificados de nuestros pecados contra la ley de Dios. No estamos justificados por obras ni por ninguna otra razón excepto por fe en la vida y muerte de Jesucristo. Por fe en Cristo el creyente ha sido declarado justo delante de Dios. El se queda libre de la ira justa de Dios. Además habiendo sido reconcilidao el creyente ya no es hostil a Dios, sino útil a Dios.

Leamos Romanos 5:9.

Antes de aceptar la justificación, por fe en Cristo cada person es en rebelión contra la voluntad de Dios. Unas personas son peores enemigos pero todos son enemigos de Dios. Expresan su hostilidad en flagrande desafío (Rom. 1:32) o puede tomar la forma de la impenitencia en medio de prácticas religiosas (Rom. 2:1-3:20). Ambos son formas de rebelión contra Dios y cada uno está bajo su ira (Rom. 1:18, 2:5). Romanos 5:10.

Cuando empieza una relación pesonal con Dios por medio de Jesucristo, cambio lados. En lugar de enemgios somos amigos de Dios. En lugar de rebelión hay sumisión y tenemos paz con Dios y no estamos bajo la ira de Dios. La arogancia cede a la agradecida (thankful) aceptación de la voluntad de Dios.

Los sentimientos de paz derivan de ese cambio de estado o sitio, no lo determian. Todo el tiempo esta en este sitio de paz con Dios porque no es una condición o conditional. Sí, hay paz conditional o relational también. Si un cristiano vive en la voluntad de Dios tiene esta paz conditional tambien. Pero la paz que aquí de que habla es porque esta en el lado de Dios, aunque no esta en la voluntad de Dios que da la paz conditional.

Versículo 2 dice, por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.

Antes de la justificación con Dios no tenemos acceso libre a Dios. Pero ahora por medio de nuestro Señor Jesucristo obtenemos entrad a la presencia de Dios. Entrada significa acceso libre. El hombre apate de Cristo está cerrado de la presencia personal de Dios y no tiene medio de acercarse a Él porque Jesucristo es Él único mediador entre humanidad y el Padre. No estamos afuera esperando los servicios sacerdotales que tenga el monopolio de la entrad a Dios. Podemos entrar en el lugar santísimo por medio del sacrificio de Cristo y Su sangre. Entramos atraves de esta puerta del acceso por la fe (Jn 10:9). Dios nos recibe en Su presencia por Su gracia (Heb. 4:16- Trono de Gracia).

Pero no solamente entramos por la gracia, estamos firmes por la gracia también. Permancemos firmes en la fe por la gracia de Dios. Dios nos mantiene firmes en nuestra salvación en Jesucristo por Su gracia. Todo es de la gracia de Dios.