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Epifania
Contributed by Paul Andrew on Jan 9, 2017 (message contributor)
Summary: Epifanía significa Manifestación, aparición o revelación.
Epifanía
Epifanía significa Manifestación, aparición o revelación.
1). Una epifanía la encontramos en el versículo 2 cuando los magos hacen esta pregunta: "¿Dónde está el rey de los judíos que acaba de nacer? Ellos no eran judíos, pero buscaban a un rey; a alguien en quien ellos pudieran creer, en quien pudieran confiar y seguir. ¿Sería acaso posible que ellos tuvieran abundancia de todo pero necesitaban algo muy digno de poseer?
La mayoría de nosotros tenemos lo suficiente para vivir, pero necesitamos tener algo que de sentido a nuestras vidas y vocaciones a través de Cristo Jesús. El significado de Navidad lo encontramos en el PREFACIO DE la Misa de NAVIDAD:
“Porque gracias al misterio de la Palabra hecha carne,la luz de tu gloria brilló ante nuestros ojos con nuevo resplandor, para que, conociendo a Dios visiblemente lleguemos al amor de lo invisible.”
Caminar con Cristo es un perenne esfuerzo de cada día. Tenemos que comenzar la jornada del día con la oración.
2). Otra Epifanía la encontramos en el versículo 3 de la Primera Lectura de Isaías, capítulo 60 —“ Caminarán los pueblos a tu luz y los reyes, al resplandor de tu aurora.”
Hablamos aquí de poderes políticos. Por supuesto que el profeta reconoce que esta nueva sociedad está muy lejos de ser una realidad. No nos debe sorprender, por lo tanto, que el Libro de la Revelación o Apocalipsis use este texto para referirse a la Jerusalén Celestial.
Se nos invita ahora a caminar con la luz, a actuar correctamente y anticipar las curvas, cuando todas las naciones lo hagan.
e.g. Los “Sydney Swans” eran la burla de la liga australiana de futbol. Tenían el peor record, los peores jugadores, el peor entrenador y los peores aficionados. La mayoría de sus juegos locales ocurrían frente a muchos sitios vacíos.
Pero sucedió algo extraño. Al equipo llegó un nuevo entrenador y unos cuantos nuevos jugadores – y….comenzaron a ganar. En poco tiempo, el equipo que había sido el hazme reir de la liga se había convertido en un poderoso partido.
Y, como todo mundo se une a un partido ganador, pueden ustedes imaginarse lo que pasó en seguida, el estadio se llenó. Miles de personas que antes no habían mostrado interés en el equipo comenzaron a participar en los juegos religiosamente. Muy pronto se hizo casi imposible conseguir entradas a un juego de los “Swans”.
Un domingo por la tarde, los Swans jugaban contra un equipo rival frente a una multitud que había llenado el estadio. Mientras las cámaras de televisión se enfocaban en la algazara y la alegría que reinaba entre los aficionados, una de las cámaras enfocó a un hombre que vitoreaba y ondeaba un letrero obviamente hecho por el. Haciendo muecas de orgullo, el sostenía en alto su letrero para que todo mundo lo viera; el letrero decía: YO ESTABA AQUI CUANDO NADIE MAS LO ESTABA!
No pierdan ustedes la oportunidad de estar con Cristo antes de que todas las naciones lleguen a El en el futuro.
3). Otra epifanía es abrirse a otras epifanías.
A veces decimos: "No me entra”, cuando hay algo que no comprendemos. Pero entonces un día se nos ocurre que aquello de que se trata no lo estamos diciendo correctamente. Entonces lo cambiamos y en vez de decir, ‘No me entra’ decimos tal vez “no dejo que me entre”.
Mantengan sus ojos abiertos para ver la estrella que pueda surgir en la noche oscura de sus almas. Y esas estrellas surgen súbitamenate. A veces lo hacen cuando vemos la sabiduría de un pequeñuelo; otras en la inesperada bondadosa acción de un amigo; aún otras, en las palabras que escuchamos en las lecturas de la Misa o en una homilía. Muy de repente, el significado de estas acciones comienza a desplegarse y la vida adquiere un precioso cariz que jamás antes se había contemplado. Y nosotros lo reconocemos y seguimos.
4). ¿Qué otra sabiduría podemos aprender de estos hombres sabios? La estrella los preparó para su encuentro con Jesús y María. Por eso, en los versículos 10 y 11, se nos dice que ellos entraron a la casa y vieron al niño con María, se postraron de rodillas y lo adoraron.
¿Recuerdan la historia de Fátima? Un angel se apareció a los niños para prepararlos a la aparición de Nuestra Santísima Madre. En un momento, el angel elevó una hostia, se postró ante ella y comenzó a alabar a Dios con sus cantos. Esto es lo que hacemos nosotros en cada Misa.