Como Vivir El Nuevo Año En Victoria.

Como Vivir el Nuevo Año en Victoria.

INTRODUCCIÓN:

Se fue…jonrón… pa la calle… Al fin terminó el 2020…que añito… crisis económica, aislamiento, disturbios sociales, disputas políticas, todo ello todo ello condimentado con la pandemia mundial del COVID-19, que empezó en China, pero ya afectado toda la humanidad.

Pero a pesar de todo esto, debemos dar gracias a Dios que te dio la oportunidad de vivir esos 365 días ya pasados y aprender de ellos. Muchos no lo lograron y hoy lamentamos que ya no están con nosotros.

Cuando se cierra un ciclo, un período de tiempo o se concluye un proyecto, los especialistas recomiendan hacer un FODA, es decir, enumerar y analizar las Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas que se vivieron para evaluar los resultados obtenidos.

Lo que tú hagas al comienzo del año determinará el comportamiento del mismo. Así que es bueno que hoy siendo el primer domingo del año estés en la Casa del Señor o dedicando este tiempo a buscar de El, y lo que empieza bien, debe terminar mejor.

Queremos entregarles hoy 10 pasos para tener un año lleno de éxito y satisfacciones.

Estos son los mismos 10 pasos que Dios le pidió a Josué que diera cuando iba a poseer la tierra prometida. Un nuevo año es una tierra prometía llena de retos y de muchas cosas que se te pueden presentar.

El verdadero nombre de Josué era Oseas, pero Moisés se lo cambió por Josué que significa "Jehová es salvación". Él fue uno de los doce espías que Moisés envió a explorar Canaán, la tierra que Dios había prometido dar a los israelitas. Caleb y Josué fueron los únicos en dar un informe positivo y lleno de fe animando al pueblo a obedecer a Dios y a ir a conquistar la tierra de Canaán. Gracias a su confianza en las promesas de Dios se les permitió entrar a la Tierra prometida (Núm. 14:30).

Leamos JOSUÉ 1:1-11 Aconteció después de la muerte de Moisés siervo de Jehová, que Jehová habló a Josué hijo de Nun, servidor de Moisés, diciendo:2 Mi siervo Moisés ha muerto; ahora, pues, levántate y pasa este Jordán, tú y todo este pueblo, a la tierra que yo les doy a los hijos de Israel.3 Yo os he entregado, como lo había dicho a Moisés, todo lugar que pisare la planta de vuestro pie.4 Desde el desierto y el Líbano hasta el gran río Eufrates, toda la tierra de los heteos hasta el gran mar donde se pone el sol, será vuestro territorio.5 Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré, ni te desampararé.6 Esfuérzate y sé valiente; porque tú repartirás a este pueblo por heredad la tierra de la cual juré a sus padres que la daría a ellos.7 Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas.8 Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.9 Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.10 Y Josué mandó a los oficiales del pueblo, diciendo: 11 Pasad por en medio del campamento y mandad al pueblo, diciendo: Preparaos comida, porque dentro de tres días pasaréis el Jordán para entrar a poseer la tierra que Jehová vuestro Dios os da en posesión.

Analicemos el reto que Josué tenía por delante:

1. Un Jordán que cruzar.= Un año por delante que te espera

2. Ciudades fortificadas que conquistar.(trabajo, peligros)

3. Guerreros que derrotar.= Enemigos envidia… (gente dispuesta a molestar, dañar).

4. Un pueblo que guiar.= hijos, congregación, empresa… (¿ que esperan otros de ti?)

Ante los grandes retos, Dios nos proporciona principios para el éxito.

1.- ESCUCHAR A DIOS. 1:1: Aconteció después de la muerte de Moisés siervo de Jehová, que Jehová habló a Josué hijo de Nun, servidor de Moisés, diciendo:

Estamos hechos a imagen de Dios, y cuando confesamos a Jesús y lo seguimos como nuestro Señor y Salvador, Su Espíritu viene a vivir en nosotros (Juan 14:17, 1 Corintios 3:16). El Espíritu de Dios nos habla a través de nuestra conciencia, ayudando a tomar la decisión correcta. Algunos pueden llamarlo “los susurros de Dios”, mientras que otros dicen: “la voz apacible de Dios”. Cuando somos tentados, ese mismo Espíritu nos advierte y nos empuja a hacer lo correcto.

Dios siempre habla, a través de su Palabra, al corazón, a través de personas o de las circunstancias de la vida. Este atento a lo que Dios te va a decir este año