Eclesiastes 11
1Echa tu pan sobre las aguas,
porque no sabes qué mal puede venir sobre la tierra.
derraman lluvia sobre la tierra;
y caiga el árbol al sur o al norte,
donde cae el árbol allí se queda.
y el que mira las nubes no siega.
o cómo se forman los huesos en el vientre de la mujer encinta,
tampoco conoces la obra de Dios que hace todas las cosas.
y a la tarde no des reposo a tu mano,
porque no sabes si esto o aquello prosperará,
o si ambas cosas serán igualmente buenas.
y bueno para los ojos ver el sol.
que en todos ellos se regocije,
pero recuerde que los días de tinieblas serán muchos.
Todo lo por venir es vanidad.
y tome placer tu corazón en los días de tu juventud.
Sigue los impulsos de tu corazón y el gusto de tus ojos;
mas debes saber que por todas estas cosas, Dios te traerá a juicio.
y aleja el sufrimiento de tu cuerpo,
porque la mocedad y la primavera de la vida son vanidad.