Amos 4
las que oprimís a los pobres, quebrantáis a los menesterosos,
y decís a vuestros maridos: Traed ahora, para que bebamos.
He aquí, vienen sobre vosotras días
en que os llevarán con garfios,
y a vuestro remanente con anzuelos.
una tras otra,
y seréis expulsadas al Harmón —declara el SEÑOR.
multiplicad en Gilgal las transgresiones;
traed vuestros sacrificios cada mañana,
vuestros diezmos cada tres días.
y proclamad ofrendas voluntarias, dadlas a conocer,
puesto que así os place, hijos de Israel
—declara el Señor DIOS.
y falta de pan en todos vuestros lugares;
pero os no habéis vuelto a mí —declara el SEÑOR.
cuando aún faltaban tres meses para la siega;
hice llover sobre una ciudad
y sobre otra ciudad no hice llover;
sobre una parte llovía,
y la parte donde no llovía, se secó.
y no se saciaban;
pero no os habéis vuelto a mí —declara el SEÑOR.
y la oruga ha devorado
vuestros muchos huertos y viñedos, vuestras higueras y vuestros olivos;
pero no os habéis vuelto a mí —declara el SEÑOR.
maté a espada a vuestros jóvenes, junto con vuestros caballos capturados,
e hice subir hasta vuestras narices el hedor de vuestro campamento;
pero no os habéis vuelto a mí —declara el SEÑOR.
y fuisteis como tizón arrebatado de la hoguera;
pero no os habéis vuelto a mí —declara el SEÑOR.
y porque te he de hacer esto,
prepárate para encontrarte con tu Dios, oh Israel.
y declara al hombre cuáles son sus pensamientos,
el que del alba hace tinieblas
y camina sobre las alturas de la tierra:
el SEÑOR, Dios de los ejércitos, es su nombre.